En las últimas horas, un mail en nombre de las esposas de militares que trabajan en la base aérea de Morón llegó a las redacciones periodísticas. En el mensaje se ventila una versión de los movimientos en el aeródromo que podría explicar, de acuerdo a los datos aportados, el traslado de 944 kilos de cocaína a Barcelona.
"Tenemos miedo de dar nuestros nombres y de nuestros esposos, por las consecuencias con los oficiales de la Fuerza Aérea que se desquitarán y pueden pasar a retiro a nuestros esposos con la consecuencia de reducirse sus sueldos, que son nuestro sustento", dice el escrito.
En un pasaje, el texto revela que "el suboficial Juan B. (el mail menciona a los militares con nombre y apellido) es mecánico de aviones y fue quien levantó el piso y las alfombras para esconder la droga debajo del piso del avión, y luego tapó todo".
Para sostener su denuncia, las mujeres afirman que el testigo de lo narrado es uno de sus maridos, en ese momento estaba de turno. No es todo: la droga, según el correo, llegó en aviones civiles que se guardan en Morón.
"El Ministro Puricelli defiende a la Fuerza, pero en la Fuerza hay gente buena, sólo hay que limpiar esta red de encubrimientos y corrupción", agregan. Esta mañana, el flamante titular de la cartera que manejaba Garré indicó que "hay mucha bronca" en la base aérea por lo ocurrido y que el escándalo del narcovuelo de Medical Jet "afecta" al Gobierno.
"Si a un avión le levantaron el piso y pusieron allí la droga, no lo pudieron hacer en África como se dice que estuvo 40 minutos, por lógica no se puede levantar una alfombra y un piso, colocar la droga, y tapar todo nuevamente en tan solo 40 minutos de escala", completan en otro párrafo, descartando la hipótesis que había lanzado el propio ministro del Interior, Florencio Randazzo, sobre la posibilidad de que el cargamento se haya subido en Cabo Verde.