El papa Francisco condenó este lunes el llamado "lobby gay" del Vaticano durante una conferencia de prensa improvisada celebrada a bordo del avión que lo conducía de Brasil a Italia, en la que recalcó que no pretende "juzgar" a los homosexuales.
"En un lobby no todos son buenos, pero si una persona es gay busca al Señor y tiene buena voluntad, ¿quién soy yo para juzgarla? El Catecismo de la Iglesia Católica explica y dice que no se deben marginar a esas personas y que deben ser integradas en la sociedad", afirmó el pontífice.
"El problema no es tener esta tendencia. Debemos ser hermanos. El problema es hacer un lobby", ha dicho el Papa.
También fue consultado por monseñor Ricca, el hombre a quien recientemente ha nombrado prelado del Banco Vaticano (IOR) y que ahora se ha visto sacudido por escándalos homosexuales. "Con respecto a monseñor Ricca, he hecho lo que el derecho canónico manda hacer, que es la investigación previa. Y no hemos encontrado nada", dijo Francisco.
Y agregó: "Tantas veces en la Iglesia, con relación a este caso y a otros casos, se va a buscar los pecados de juventud y se publican. Y hablo de pecados, no de delitos como los abusos de menores. Pero si una persona -laica, cura, o monja- comete un pecado y luego se arrepiente, el Señor la perdona. Y cuando el Señor perdona, olvida".
Además, se manifestó a favor de un mayor papel de las mujeres dentro de la Iglesia, pero rechazó rotundamente su ordenación como sacerdotisas, informó AFP.
Por último, sobre el rol de la mujer en la Iglesia, Francisco expresó que "una Iglesia sin mujeres es como el Colegio Apostólico sin María". "El rol de la mujer en la Iglesia no es sólo la maternidad, la madre de familia, sino que es más fuerte, es el icono de la Virgen, de la Madonna, esa que ayuda a crecer a la Iglesia. Piensen que la Virgen es más importante que los apóstoles. La Iglesia es femenina, es esposa, es madre".
"En la Iglesia hay que pensar en la mujer en esta perspectiva de elecciones arriesgadas, pero como mujer, hay que explicitar. Creo que aún no hemos hecho aún una profunda teología en la Iglesia. Sólo un poco de eso, un poco de aquello, lee la lectura, mujeres monaguillo, es la presidenta de Cáritas... Pero hay más, hay que hacer una profunda Teología de la mujer. Esto es lo que pienso". Pero a la hora de responder sobre si podría existir la ordenación de mujeres, expresó: "La Iglesia ha hablado y dice no. Lo ha dicho Juan Pablo II, pero con una formulación definitiva. Esa puerta está cerrada".