La situación en la provincia del Jefe de Gabinete, ante la posibilidad de un efecto contagio de las protestas policiales, es expectante. “Estamos trabajando intensamente para prevenir cualquier foco de conflicto”, dijo a PERFIL Marcelo Churín, secretario de seguridad del Chaco. Pero marcó también un límite a los reclamos salariales: “No podemos prometer lo que las arcas del Gobierno no tiene”.
Sin embargo, uno de los referentes que encabezaron la protesta policial el año pasado, el suboficial mayor Jorge Duarte, contó a PERFIL que “de los 15 puntos de un petitorio que presentamos, no se cumplió ninguno” y remarcó que están buscando dialogar con los jefes policiales, pero les “cerraron todas las puertas”.
Uno de los “puntos incumplidos” que generó más malestar es el compromiso de que no habría represalias. Según denunció Duarte, “hay más de cien policías que podrían ser separados y esto generó un enojo”. Más allá del enojo del personal policial, Duarte descartó la posibilidad inminente de un acuartelamiento.