En Córdoba, todos los sondeos indican que la intención de voto es liderada cómodamente por el peronista Juan Schiaretti, con una ventaja de entre 8 y 10 puntos porcentuales, según la encuestadora que realice el estudio. Detrás, su más inmediato perseguidor, es el radical Oscar Aguad, muy cuestionado en el interior de su partido por buscar una nueva reelección en la Cámara baja.
El tercer lugar parece ser el puesto más reñido y se lo disputan Carolina Scotto, la representante del kirchnerismo en la provincia y el candidato del PRO, Héctor Baldassi, seguidos de cerca por Olga Riutort, la ex esposa del gobernador De la Sota con quien mantiene una vieja disputa digna de un culebrón televisivo.
El desafío del Frente para la Victoria en Córdoba es captar el voto kirchnerista, en medio de una campaña en donde absolutamente todos los demás candidatos cuestionan con dureza al gobierno nacional. En ese sentido, el plan de Scotto es enfrentarse al gobernador, consciente de que la polarización de la campaña puede darle buenos réditos, juego que también le resulta conveniente al justicialismo cordobés y que derivó en los últimos días en un cruce de declaraciones.
El disparador de los enfrentamientos fue un spot de campaña donde se ve a José Manuel de la Sota y a su candidato Juan Schiaretti enfatizando que la Provincia “progresa” con “recursos propios”, mientras contemplan orgullosos un vistoso puente. El aviso molestó a Scotto quien señaló que el “Puente del Bicentenario” en la ciudad de Río Cuarto se construyó con fondos provenientes de la Nación.
El gobernador salió al cruce de las afirmaciones formuladas por la ex rectora calificándola de “mentirosa”. “Mandé a comprar un disco de Karina, ese que dice: ‘Corazón Mentiroso’ y se lo voy a mandar ahora a Scotto, porque miente y no vale la pena hacer esas cosas por más que esté en campaña”, sentenció el mandatario provincial.
El resto. Con objetivos más modestos Domingo Cavallo, uno de los candidatos que generó sorpresa en la presentación de las listas, buscará superar el mínimo del 1,5% de los votos válidos, necesario para competir en las elecciones de octubre.
El ex ministro de Economía, que va por la fuerza encabezada a nivel nacional por el puntano Adolfo Rodríguez Saá, propuso un debate en la última semana con la idea de ganar visibilidad ante el electorado.
Por su parte el FAP, con su principal socio en Córdoba, el Frente Cívico, marcha muy lejos en las encuestas y el partido intentará sobrevivir sin la presencia de Luis Juez como candidato. En su lugar va una de sus espadas, el aún diputado Ernesto Martínez, quien aspirará a sentarse en esa banca por segunda vez consecutiva.
Para el resto de los partidos, la jornada electoral servirá para conocer dónde se encuentran parados de cara a la disputa del 27 de octubre.
Los cordobeses encontrarán en el cuarto oscuro 16 boletas correspondientes a 11 partidos y dos de las fuerzas políticas más importantes de la provincia como la del Partido Justicialista y la UCR.