El PJ Bonaerense se congregó hoy en la localidad de San Nicolás como parte de la serie de encuentros que mantiene en distintos distritos de la provincia, cuya gobernación perdió a manos de Cambiemos, en medio de la interna que atraviesa al espacio y a la espera de la resolución de la Cámara Nacional Electoral sobre los comicios internos nacionales.
El jefe del sello provincial, Fernando Espinoza, sostuvo en ese marco que "el peronismo tiene que ganar la calle para ponerle un freno" a las medidas económicas del macrismo. "No nos derrotaron, perdimos una elección, ellos nos ganaron pero una cosa es ganar una elección y otra cosa es saber gobernar", consideró en su discurso, según informó la agencia DyN.
Y señaló: "En estos 140 días de gobierno, lo único que vimos son ajustes salvajes para los que menos tienen y vimos beneficiar a los que más tienen. Cada día retrocedemos más y el peronismo tiene que ganar la calle para ponerle un freno".
"Vemos un gobierno muy improvisado con funcionarios que no tienen sensibilidad social ya que son CEOS de empresas, no conocen a los pobres, no conocen los trabajadores", sentenció.
A su vez, el excandidato a presidente por el Frente para la Victoria, Daniel Scioli, manifestó que "el sector financiero tiene que estar a disposición del sector productivo y no para el trabajo financiero". Y agregó: "Tenemos que defender la industria nacional que se ve muy perjudicada por la devaluación y las medidas tomadas por este gobierno".
La diputada nacional y vicepresidenta del PJ bonaerense, Cristina Alvarez Rodríguez, en tanto, señaló que la reunión fue "muy intensa" y se mostraron "preocupados por los despidos" en distintos sectores y "por el impacto del aumento de las tarifas no sólo en los hogares, sino también en las pymes".
"La unidad del peronismo hoy es importante para enfrentar el ajuste y el tarifazo de Macri", señaló y consideró "fundamental el proyecto de emergencia laboral que queremos tratar desde el Congreso".
Espinoza convocó a los dirigentes a tres días de la ruptura ocasionada en el bloque de diputados provinciales del Frente para la Victoria, a partir de la salida de un grupo de 13 legisladores referenciados en el peronismo ortodoxo y enfrentados a los sectores del kirchnerismo alineados con la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner. Por esa razón, si bien el PJ bonaerense logró una amplia convocatoria, el cónclave no contó con la presencia de los referentes de La Cámpora ni de los intendentes encuadrados en el kirchnerismo.
El documento del sello, que tuvo como eje central el repudio a los despidos, llevó la consigna "Ni un despido más, ni un derecho menos". Bajo los lemas "Lealtad y Unidad" y "Convicción y Futuro", el encuentro se realizó en el Centro de Jubilados de la UOM de San Nicolás, un distrito gobernador por el peronista Ismael Passaglia, y estuvo estructurado en cuatro paneles.
Del primer panel, de orden político, participaron el diputado provincial Walter Abarca, jefe de la flamante bancada del FpV-PJ; la intendenta de La Matanza, Verónica Magario; el senador Juan Manuel Abal Medina; el ex presidente de la Cámara de Diputados Julián Domínguez y el referente del Movimiento Evita Fernando "Chino" Navarro, entre otros.
El panel de "Trabajo y Producción", fue encabezado por el jefe de la CGT Alsina, Hugo Caló, y participaron los dirigentes Débora Giorgi, Osvaldo Rial, Naldo Brunelli, Alejandro "Topo" Rodríguez y Marcelo Fernández, mientras la mesa económica fue coordinada por Roberto Feletti y Silvina Batakis.
El peronismo espera para el lunes la resolución de la Cámara Electoral sobre la viabilidad de la lista de unidad conformada para los comicios internos de mayo, luego de haber apelado la decisión de la jueza María Servini de Cubría de prorrogar la fecha de cierre de nóminas para dar lugar a una organización que apoya al ex presidente Eduardo Duhalde.