El fuerte aumento que dispuso el gobierno porteño sobre el impuesto inmobiliario podría derivar en subas promedio del 10 por ciento en los alquileres de propiedades de la Ciudad, según las proyecciones de la Cámara Inmobiliaria Argentina (CAI).
Así lo aseguró en diálogo con DyN el titular de la representación empresaria, Carlos Sotelo, quien cuestionó con dureza la medida dispuesta por el jefe de gobierno porteño, Jorge Telerman, de autorizar alzas de entre el 50 y el 230 por ciento en la tasa de Alumbrado, Barrio y Limpieza (ABL).
"No es lógico que una medida de esta importancia sea adoptada por un gobierno que se va en 90 días. La decisión, tal y como está, va a producir una profunda diferenciación, discriminación y una injusticia muy grande", manifestó el titular de la CAI.
De todos modos, uno de los impactos más directos que producirá la suba, según Sotelo, es que "estos aumentos van a tener directa incidencia en el alquiler, porque el ABL lo paga el inquilino".
"El aumento directamente va a incidir en los costos de las locaciones. Las proyecciones y en base a un promedio de lo que se paga en general en la Ciudad es que el ABL puede provocar una suba de hasta un 10 por ciento en el alquiler", manifestó el titular de la Cámara.
"Nosotros vamos a sugerir que el costo extra sea afrontado en forma compartida por todas las partes involucradas, pero en realidad siempre son los propietarios los que ponen las condiciones. Vamos a proponer que esto incida lo menos posible en los costos de los alquileres, pero no está en nuestras manos", consideró.
"Esta es una medida recaudatoria que no la debía tomar el gobierno, pero, en caso de tomarse, debió ser con una técnica más lógica", continuó. Finalmente, advirtió que la medida fue tomada de una forma "indiscriminada, por lo que va a haber desafasajes tan grandes, injustos y el mayor peso caerá en la zona dos, que es el centro de la Ciudad, donde hay vecinos que en su mayoría son de ingresos medios bajos".
Fuente: Dyn