Las nueve carillas a través de las cuales la Corte Suprema de la Nación ratificó la suspensión del artículo más polémico de la Ley de Medios tienen un dato más que particular que dará que hablar en el Gobierno. Puede resultar un detalle menor o no, si se tiene en cuenta la obsesión del kirchnerismo por el asunto mediático. El fallo que publicó el Centro de Información Judicial confirmando la medida cautelar está todo escrito a máquina, salvo un dato: la fecha fue anotada a mano con lapicera.
¿Era un fallo unánime que ya estaba escrito? El 2 de septiembre, el diario Clarín sostuvo que la decisión de la Corte de ratificar la cautelar a favor del grupo multimedio ya estaba tomada. “En la Corte ya están los votos, pero se demora una decisión”, tituló ese día el diario de Noble y Magnetto.
El kirchnerismo respondió enseguida, a través del ministro de Economía, Amado Boudou, quien en una conferencia de prensa mostró la página de Clarín y dijo: "No sabemos cuáles son los métodos utilizados para esta justicia express, pero sin duda los buitres de nuestro país, Magnetto, diario LA NACION, son buitres y pulpos porque van extendiendo sus tentáculos".
Ese domingo 5 de septiembre, Joaquín Morales Solá, una de las plumas más denostadas por el Gobierno, a quien la señora Hebe de Bonafini comparó con una víbora venenosa, confirmó que la decisión que la Corte hoy hizo pública ya estaba tomada.
“La furia oficial se entiende mejor cuando se entreabren las puertas del probable futuro. El Gobierno sabe que en la Corte se cocinan malas novedades para las obsesiones de los Kirchner. Ya existen seis votos, de los siete que hay en total, para resolver que el máximo tribunal no levantará una medida cautelar que protegió los intereses de Clarín”, escribió en su columna dominical.
Hoy, un mes después de esa columna y luego de un impensable conflicto que incluyó la denuncia al gobernador de Santa Cruz, Daniel Peralta, por no reponer al ex procurador Sosa, el fallo por la extradición no concedida del ex guerillero Galvarino Apablaza y las polémicas por el recorte presupuestario del 40% que denunció el Tribunal, el documento con la fecha manuscrita reaviva la interna feroz entre el kirchnerismo y la Justicia. Puede ser un pequeño detalle o la semilla de una nueva pelea de poder.