La fiscal Vivina Fein pidió la pericia balística para reproducir el disparo de la pistola Bersa calibre 22 que mató a Alberto Nisman, con el objeto de comprobar si el arma deja rastros de fulminante.
Fuentes del caso indicaron que Fein espera la respuesta de la Procuración y que ya envió un oficio a Salta para ejecutar la pericia en el laboratorio del Cuerpo de Investigaciones Fiscales de esa provincia.
La fiscal demoró el estudio debido a que no creería posible reproducir las mismas condiciones ambientales (humedad y temperatura) en las que se produjo el disparo en el baño del ex fiscal de la UFI-AMIA. Además, cabe la posibilidad de que la sangre haya barrido los rastros de la deflagración, si los hubo, por lo que no sería determinante.
Fein solicitó que el arma que terminó con la vida del fiscal, propiedad de Diego Lagomarsino, sea disparada en intervalos de diez horas y que la pericia sea presenciada por el secretario Bernardo Chirichella.