"Yo soy optimista, creo que sí (dejarán entrar a Timerman) pero no depende de nosotros", sostuvo el flamante diplomático, que fue oficializado como sucesor de Martín Lousteau el pasado jueves, cuando se publicaron los nombramientos en el Boletín Oficial.
El martes 9 de enero desde el gobierno norteamericano le revocaron la visa al exministro de Relaciones Exteriores y Culto, aludiendo al procesamiento y prisión preventiva (domiciliaria) a la causa por presunto encubrimiento de Irán en el atentado a la AMIA.
Ante esa situación, el juez federal Sergio Torres, que sustituye durante la feria a Claudio Bonadio, le concedió la excarcelación por "razones humanitarias y extraordinarias", para permitirle así solicitar a Estados Unidos que revea su decisión y pueda viajar.
Respecto a la postura del Gobierno nacional ante lo sucedido, el embajador manifestó que el Gobierno nacional “ha tomado la decisión de tener una actitud humanitaria hacia este tema, y no de ningún otro tipo”. Es por eso que, sostiene Oris de Roa, “suponen que el sector consular de la Embajada va a encontrar alguna solución".
En una entrevista que brindó a diario Clarín, el sucesor de Lousteau remarcó que "Estados Unidos está muy atento a los pedidos argentinos hoy", sosteniendo su optimismo respecto de la decisión que debe tomar el Departamento de Estado y que involucra al excanciller.
Si bien desde el Gobierno expresan una postura a favor de que Timerman pueda viajar, la difícil situación del exfuncionario del kirchnerismo no recibió una respuesta "humanitaria" desde todos los sectores: Eduardo Feinmann, Federico Andahazi y Fernando Iglesias tuvieron fuertes comentarios sobre la negativa estadounidense y el delicado estado de salud de exfuncionario.