Vilma Ripoll, criticó las condiciones de precariedad en las que los trabajadores ferroviarios desempeñan sus tareas y cómo quienes deberían defender sus derechos permanecen ligados a la patronal, y habló de una "propiedad familiar" para referirse al cargo clave que ocupa la esposa de José Pedraza.
“La administración actual de la línea Roca y Belgrano Sur, desde 2007, está integrada por una unión de Ferrovías, Metrovías y TBA, que son dueños de otras líneas. Tienen 14 empresas tercerizadas, que es un mecanismo que surgió con la reforma laboral del comienzo de los años del menemismo, y mantienen 1500 trabajadores en esa situación laboral”, explicó la legisladora.
Un día después de la muerte de Mariano Ferreyra, que todavía no tiene responsables materiales, Ripoll denunció que la situación de los trabajadores “es absolutamente precaria. Les pagan la mitad del sueldo y el régimen laboral les hace trabajar el doble: en calidad y muchas veces en cantidad de horas”.
La “Unión Ferroviaria es dueña de la cooperativa Unión Mercosur, que es una de las 14 empresas tercerizadas, y además socio en otras y la propia esposa de Pedraza es la presidente del Belgrano Cargas que es otra de las líneas (que pertenece a la Unión): es una propiedad familiar. Se sienten cuestionados como empresarios no como dirigentes sindicales”, indicó al tiempo que resaltó que “es duro para esos trabajadores, que están solos y encima el sindicato, que los tendría que defender, es parte de la patronal”.
En otro pasaje, la dirigente se refirió al manejo de los subsidios y aseguró para cobrarlos "es que han separado tareas de convenio y dibujado, organizado, para decirlo de alguna manera, tercerizadas" Estas, según Ripoll, "cobran los subsidios, le pagan a los trabajadores la mitad o menos de lo que le pagan a un trabajador en blanco y el resto se lo quedan. Es la forma que tienen de justificar los subsidios y quedarse con un gran negocio y se lo reparten siempre los mismos".
En este contexto señaló a las empresas "Metrovías es el subte y el Urquiza, TBA es Cirigliano que es la línea Plaza de colectivos y la otra línea de ferrocarril, la que llega a Once. Ellos todos son los que reciben los millones de subsidios todos los años. Entonces, reciben subsidios, se enriquecen, precarizan de manera terrible a los trabajadores separando las tareas menos específicas como pueden ser vías y obras, limpieza, mantenimiento y desmalezamiento, vigilancia y así dibujan, organizan formas de recibir los subsidios".