Fabián Gutiérrez, ex secretario de la vicepresidenta Cristina Kirchner y uno de los arrepentidos de la causa de los Cuadernos, apareció muerto ayer en El Calafate, luego de permanecer desaparecido durante aproximadamente un día y medio.
El caso causó un fuerte impacto en la comunidad santacruceña pero también en todo el arco político, por su estrecho vínculo con el matrimonio Kirchner, su declaración clave en la polémica causa de corrupción que involucró a funcionarios y empresarios ligados a la obra pública y también por las características del crimen.
Durante la semana pasada, a Gutiérrez se lo vio transitar con su camioneta por las calles de El Calafate, de acuerdo a testigos locales que también lo vieron haciendo compras en un supermercado y en un comercio cercano. Sobre la noche del jueves, no obstante, su madre, Teresa García, realizó una denuncia policial por no tener noticias de él ni poder ubicarlo en su celular como solía hacerlo. El viernes se dispuso un amplio operativo de rastrillaje por el casco urbano de la villa turística hasta que, por la tarde, se encontró su teléfono en una obra en construcción abandonada en las afueras de la localidad.
En ese contexto, la Policía activó un procedimiento en el domicilio de Gutiérrez, de 46 años. Allí estaba su camioneta, con un vidrio roto y en su interior fueron halladas las llaves de la casa y una campera con manchas de sangre, una prenda que sus allegados reconocieron luego como de propiedad de Gutiérrez.
El ex funcionario había llegado hace unos pocos días a El Calafate en un vuelo de “repatriados” proveniente de Buenos Aires y se encontraba cumpliendo la cuarentena obligatoria en una casa alquilada, ya que la lujosa casa que posee en esa ciudad está ocupada por uno de sus familiares.
Allí se montó un amplio operativo policial para encontrar posibles rastros del ex secretario presidencial, devenido empresario, bajo las órdenes del juez Carlos Narvarte y la fiscal Natalia Mercado, que se pusieron al frente de la investigación. La fiscal es hija de la gobernadora de Santa Cruz Alicia Kirchner y, a su vez, sobrina de Cristina, por lo que la oposición pidió su apartamiento de la causa.
A raíz de los allanamientos y el secuestro de elementos importantes, el viernes mismo se dispuso la detención de cuatro personas, situación clave en el posterior hallazgo del cuerpo de Gutiérrez.
Los detenidos son jóvenes de entre 19 y 23 años y, de acuerdo las primeras informaciones, uno de ellos habría mantenido una relación amorosa con Gutiérrez, con el objetivo de extorsionarlo posteriormente. Narvarte lo describió como una “amistad profunda” y marcó como un dato “muy llamativo” la edad de los detenidos.
El cuerpo de Gutiérrez fue encontrado enterrado y envuelto en una sábana en una cabaña ubicada en el barrio del aeropuerto viejo de esa localidad, donde residía uno de los cuatro jóvenes detenidos por el hecho y presentaba heridas de arma blanca y golpes. “El hecho ocurrió en la vivienda de él y fue trasladado en su camioneta” hasta el lugar donde fue encontrado el cuerpo, precisó el juez al acercarse al sitio. En la cabaña también se encontraron un televisor y un equipo de música que le habían robado a Gutiérrez de su casa.
La primera hipótesis del juez, que no mencionó posibles motivaciones políticas en el hecho, es que “una persona tomó la decisión y las otras colaboraron”, con lo que los cuatro involucrados no tendrían el mismo nivel de responsabilidad, aunque ya anticipó que se encaminan hacia una acusación por “homicidio calificado” con una pena de prisión “perpetua”, dijo.
Uno de los detenidos es Facundo Zaeta, quien pertenece a una reconocida familia de El Calafate ya que su abuelo, Oscar Zaeta, es el principal escribano de la ciudad, y posee antecedentes penales por una causa que lo vincula a las drogas Los otros detenidos son el hermano de Facundo, cuyo nombre no trascendió, Maximiliano Gómez, ligado a la familia de un antiguo intendente de El Calafate, Oscar Gómez, también vinculado al actual jefe comunal Martín Belloni, y “Juanca” Monzón.
El Calafate es una localidad de 25 mil habitantes y debido a los parentescos que tienen las familias involucradas con las autoridades políticas de la ciudad, existe la posibilidad de que los detenidos sean trasladados a Río Gallegos para seguir el proceso desde allí.
Debido a la inmediata repercusión que tuvo la muerte de Gutiérrez, su familia difundió un comunicado en el que rogó a “medios, periodistas y dirigentes de todo el arco político, respeto, empatía y paz, pero sobre todo calma, dejando actuar a la Justicia, apartándose de hacer especulaciones dolorosas, interesadas, de todo tipo y color”.
En el breve mensaje, destacaron que “Fabián era ante todo una persona. Dueño de corazón inmenso y una calidad humana extraordinaria” y pidieron a Dios que “nos ayude en este difícil momento y en la imperiosa búsqueda de Justicia”.
El pedido de la familia está vinculado con las conexiones políticas que supo tener Gutiérrez, pese a que el juez de la causa estimó que su muerte no tendría que ver con ese factor. Es que el ex secretario presidencial había declarado en la causa de los Cuadernos como “arrepentido” pero no formaba parte del programa de testigos e imputados protegidos.