La titular de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, se refirió al Papa Francisco como alguien que "juega un papel al lado del pueblo", previo a su en el Vaticano.
A los 87 años, la mujer de los pañuelos blancos, con dos de sus tres hijos desaparecidos, prepara su viaje a Roma para ser recibida por su compatriota, el excardenal Jorge Bergoglio, el viernes 27 de mayo en la casa pontificia de Santa Marta.
La dirigente humanitaria admitió haberse equivocado en sus críticas al Papa y ahora lo elogia, en una entrevista que brindó para la agencia AFP.
AFP: ¿Por qué aceptó la invitación papal?
Hebe: Me invitaron cuando asumió (2013). Yo decía, ¿para qué ir tan lejos?. Iba todo el mundo. No me parecía bien.
AFP: Usted lo había criticado cuando lo nombraron.
R: Desde que Bergoglio se convirtió en Francisco, uno empezó a conocer a otra persona, no sabíamos que iba a los barrios. Creo que Francisco tapó a Bergoglio. En las villas miseria (asentamientos populares) me dicen que llegaba en días de lluvia, con botas, ayudaba a dar de comer a los chicos, a sacarlos cuando había epidemia.
AFP: ¿Se equivocaron con él?
Hebe: Sí. No sabíamos que iba a los barrios a trabajar por los pobres.
AFP: ¿Y ahora qué piensa?
Hebe: Si no tuviera esperanzas no iría a verlo. No soy de hacer cosas de falsedades.
AFP: ¿Qué piensa decirle?
Hebe: No voy a hablar de cosas personales ni de Madres, sería egoísta. Las cosas que están pasando en Argentina y Latinoamérica son muy serias.
- Misa por asesinados -
AFP: El Vaticano anunció que abrirá archivos de la dictadura.
Hebe: Yo no lo pedí. Nadie guarda cosas muy graves que se hacen. No creo en los archivos de nadie, ni de los 'yanquis', ni de la Iglesia. Había obispos que bendecían a quienes tiraban a nuestros hijos al mar, eso no lo van a guardar.
AFP: ¿Nunca le pidió nada?
Hebe: Sí, que se diera una misa en el Vaticano por todos los sacerdotes, monjas y obispos desaparecidos del Tercer Mundo. Algo como la canonización de Arnulfo Romero (arzobispo salvadoreño asesinado).
AFP: ¿El Papa tiene una posición política?
Hebe: Es peronista (movimiento político fundado por Juan Perón en los años 40). Y el peronismo está con el pueblo, con los trabajadores. La consigna de Francisco es techo, trabajo y tierra. Son consignas peronistas.
AFP: ¿Francisco emite mensajes políticos?
Hebe: Sí. Le dijo a los jóvenes que hagan lío. ¡Ni un cura lo dice! Es una postura bien clara. Tomen las calles, no se queden encerrados. Tiene poder mundial. Paró un bombardeo de la OTAN (en Siria). Es el primer Papa que juega un papel al lado del pueblo.
AFP: iquest;El Papa envía señales?
Hebe: Todo el tiempo. Va a pueblos desposeídos de África. Le lava los pies a un preso. Esto de traer a los sirios al Vaticano es decir que cada uno puede alojar a una familia.
AFP: ¿Preparó su discurso?
Hebe: Tengo escritas cosas (muestra papeles a mano). De pronto borro algo, las cambio. No voy a contar de qué voy a hablar porque es una reunión privada. Llevo dos proyectos, dos propuestas. Si él considera que tenemos que decirlo, lo diré. Quiero respetar.
- Crítica a Macri -
AFP: El gobierno argentino se muestra incómodo con la audiencia.
Hebe: Les molesta todo lo que hago. Este gobierno es enemigo del pueblo. Echan 1.200 trabajadores por día. Reprimen a los chicos que juegan a la pelota en los barrios pobres. Quieren imponer el miedo y el terror. Es muy peligroso esto. Con los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner (centroizquierda) éramos felices. Muestra odio de clase, alienta la violencia.
AFP: ¿Teme un estallido de violencia?
Hebe: Ellos quieren eso. Ha habido ataques a balazos contra locales partidarios. Pero nosotros decimos que no a la violencia. Defendemos la vida. Los hospitales no tienen insumos. El pan subió a 40 pesos y la leche a 20 pesos (30% de alza) ¿Qué quieren, saqueos? Hay gente asustada de perder el empleo.
AFP: ¿Le va llevar un regalo al Papa?
Hebe: Algo pequeño. Lo que no voy a hacer como (el presidente Mauricio) Macri que le regaló una cruz. ¡Es como llevar naranjas a Paraguay! Y no me voy a comprar ropa para la audiencia. Me voy a coser un saco que tengo roto. La gente me llama y me dice que la reunión dure más de los 22 minutos que le dio este año a Macri (ríe).
