El gobierno jujeño finalmente ayer llegó a un acuerdo con los 2 mil desocupados que desde hacía tres semanas tomaban un predio en La Esperanza en reclamo de viviendas. El terreno en disputa, el ingenio azucarero La Esperanza, supo ser la empresa más importante de San Pedro de Jujuy y presentó quiebra hace unos meses, dejando a miles de trabajadores desocupados. El Gobierno Provincial hace meses le otorgó los terrenos a la piquetera Milagro Sala y su organización, Tupac Amaru, quienes ayer exigían la liberación de ese terreno.
Sala, quien ya se había enfrentando violentamente con familias asentadas en las tierras del ingenio La Esperanza, se encontraba acampando con su organización desde hace una semana frente al Ministerio de Desarrollo Social de la provincia en reclamo de bolsones navideños, aguinaldo social y la liberación de las tierras mencionadas.
Durante estos últimos días, el conflicto se intensificó debido a que ni el Gobierno Provincial ni el Nacional daban respuestas. Ante esta situación, el intendente de La Esperanza, Sergio Gustavo Bautista, analizó iniciar una huelga de hambre para exigir ayuda.
Finalmente los okupas llegaron a un acuerdo ayer con el Gobierno Provincial, gracias a la oferta que recibieron, similar a la que consiguieron los ocupantes del Parque Indoamericano de Villa Lugano en la Ciudad de Buenos Aires: el Estado otorgará 25 mil pesos por unidad habitcional a las 500 familias jujeñas más 23 hectáreas ubicadas en un predio conocido como "Soledad".
Raúl Noro, Secretario de Comunicación de la Organización Tupac Amaru, dijo en diálogo con Perfil.com: "Nosotros no somos okupas, a nosotros nos ocuparon". Y agregó: "El conflicto en La Esperanza es anterior a la ocupación de Villa Soldati y Villa Lugano. Lo importante es que el Gobierno Provincial se puso los pantalones para solucionar el conflicto y nosotros vamos a poder seguir trabajando en la construcción de viviendas, que ya suman 120 en San Pedro".
El acuerdo fue firmado por una comisión integrada por el presidente del bloque de diputados del PJ, Rubén Rivarola, la secretaria de Planificación del ministerio de Infraestructura Mónica Boero y el titular del Instituto de Vivienda y Urbanismo, Facundo Figueroa, junto al intendente Sergio Gustavo Bautista. Tras al forma del acta de compromiso, Rivarola declaró: “Estoy convencido que nuestro Gobierno Provincial, con la buena predisposición de las autoridades de Ingenio La Esperanza, el acompañamiento y gestiones del intendente Gustavo Bautista, ha saldado una deuda histórica con los trabajadores azucareros. Tuvieron que pasar generaciones para que hoy las familias puedan acceder a un pedazo de tierra donde podrán construir sus viviendas y vivir dignamente”. Según él, de esta manera “se pone punto final a una situación que lleva casi un siglo, en la que los trabajadores de la empresa vivían en condiciones infrahumanas, con letrinas y con duchas comunitarias”.