Acompañado siempre por su esposa, la ex modelo Nequi Galotti, Bartolomé Mitre (70 años), el principal accionista y heredero del diario La Nación sufre por su salud. En su entorno admiten un problema en los riñones que lo obliga a realizarse un tratamiento de diálisis tres veces por semana. Y reconocen que busca un trasplante para mejorar su calidad de vida. Como si fuera poco, recibe embates cada semana desde la Rosada por la judialización de Papel Prensa.
Los médicos descubrieron el mal hace tres años. Al principio Mitre lucía desmejorado y hasta había bajado de peso, pero ahora logró subir algunos kilos y recuperó su aspecto. No sólo volvió a jugar al tenis todas las semanas sino que ya evalúa viajar en los primeros días de noviembre a México, para participar de la 66ª Asamblea General de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), un marco ultracrítico de los K.
Sus amigos aseguran que, pese a todo, se mantiene de buen humor y que se lo ve bien: “No se preocupen que no corre riesgo de vida”, dicen. Pero como Mitre debe atravesar turbulencias por las acusaciones de haber cometido delitos de lesa humanidad en el traspaso de Papel Prensa, la insuficiencia renal plantea un nuevo desafío.
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