Diego Lagomarsino, el ingeniero informático señalado de ser partícipe necesario en el presunto homicidio de Alberto Nisman, aseguró este jueves que no tiene "bronca" con el fallecido fiscal. Además, se quejó de la tobillera electrónica que debe usar: "Es una mierda", calificó.
"No le tengo nada de bronca a Alberto Nisman. Si se suicidó no estaba en sus cabales, si lo mataron no tuvo nada que ver, no puedo tenerle bronca", manifestó Lagomarsino al dar la primera entrevista luego de haber declarado el martes ante el juez Julián Ercolini.
"Tengo miedo de ir preso ¿quién no tendría miedo de eso? Pero más miedo tengo porque soy inocente. Si hubiera sido culpable, bueno, tenés una responsabilidad, hacete cargo; en mi caso, no tengo responsabilidad en lo que pasó. Juzgame por llevar el arma, pero no me acuses de algo que no es", completó en declaraciones a Radio Con Vos.
En ese contexto, hizo alusión a la tobillera electrónica que le colocaron, la cual cuenta con un sistema de localización satelital que reporta todo el tiempo su ubicación a un centro de monitoreo, y que fue ordenado por la Justicia ante un posible riesgo de entorpecimiento de causa: "No puedo ni bajar a la pileta de mi casa, es una mierda, la debería tener un delincuente", señaló.
Acerca del día puntual de la muerte de Nisman, el ingeniero aseguró: "Alberto me pidió un arma y yo se la llevé. El plan (del que me acusan) no existe. Alberto me pidió el arma para la protección de sus hijas. Yo no sabía que estaban en Europa. Alberto me había dicho que se iba de vacaciones, no me dijo con quién. Cuando me pidió el arma, yo le pregunté si no tenía un arma encima".
"Hay que tomar el contexto. Había denunciado al presidente, y eran lógicos los miedos que me planteó", expresó al tiempo que aseguró que el extitular de la UFI-AMIA le había dicho que ya no confiaba en su custodia.
Al hablar del vínculo que lo unía con Nisman, indicó: "Era una relación, que después la evalué en terapia. No podía decirle que no, estaba siempre disponible para él. Mi terapeuta definió lo de 'amo-esclavo'".
Consultado sobre el papel que jugaron los peritos de Gendarmería que realizaron la pericia, el ingeniero afirmó: "Mis peritos encuentran muchas diferencias que son muy llamativas, como la aparición de ketamina y no norketamina en su metabolito, en el hígado. El metabolito es la transformación de un químico en otro a través los órganos del cuerpo. Si hubo ketamina, debería haber existido en el hígado la norketamina, que es su modificación. No apareció norketamina. Dudo de la pericia de Gendarmería. Estaría bueno contrastar las pericias para encontrar la verdad".
Acerca de si cree que la muerte de Nisman de trató de un suicidio, respondió: "Creo que fue un autodisparo, no sé el motivo. La mecánica es autodisparo y el término legal es suicidio. No lo veía con ánimos de quitarse la vida, ni loco. Alberto tenía altibajos de humor, altibajos de 5, 10 minutos. Cuando lo vi ese sábado, estaba bien, y se quebró cuando me dijo lo de las hijas".
Consultado por el papel de la exesposa de Nisman, la fiscal Sandra Arroyo Salgado, declaró: "dijo muchas cosas, después se comprobó que eran falsas. Desde el primer día quiero hablar con ella", argumentó. En ese marco, agregó: "La verdad es una sola, y en este caso tenemos dos autopsias con resultados distintos, deberían contrastarlas".
"Ruego por que se sepa la verdad, no nos merecemos vivir en un país en el cual no se cree en la justicia", concluyó Lagomarsino.