El abogado especialista en Derecho Internacional Público, Antonio Remiro Brotóns, fue uno de los invitados que expresó que “la negociación, según el tratado internacional, tendría que durar seis meses y de fracasar se abriría una fase judicial de 18 meses de tribunales argentinos hubiera o no sentencia”.
El documental de la Universidad de Madrid, aseguró que “a partir de ese momento, el inversionista podría plantear un arbitraje”. Brotóns contestó en RTVE que “estamos ante una expropiación pura y dura que establece dos condiciones” al ser consultado sobre si había o no forma de obligar a un “Estado soberano como el argentino a dar marcha atrás”.
El catedrático sostuvo: “En efecto aquí se discute si apuntar sólo a una parte de los accionistas y no repartir equitativamente entre todos ellos ese 51 por ciento que se quiere expropiar, eso no es discriminación”.
Al referirse al supuesto peligro que corrern las garantías jurídicas para futuros inversionistas en Argentina, el abogado español destacó: “Evidentemente crea una sensación, cualquier inversor tiene que pensar si le va a convenir o no invertir en un país en el que el Gobierno tiene una visión algo sesgada de lo que es el mercado libre y por lo tanto dada la volatilidad de las reglas del juego quizás no me interese invertir en ese país”.
