Pese a las críticas que recibieron los anuncios previos, el jefe de Gobierno, Mauricio Macri, firmó el decreto que aumentó los sueldos de sus ministros. La medida estableció además que los funcionarios de la administración PRO recibirán una bonificación extra por "objetivos cumplidos" de gestión.
Después de manifestar ante los medios que los política pagaba "sueldos de hambre", Macri lo hizo: firmó el decreto 664/08, publicado hoy en el Boletín Oficial de la Ciudad de Buenos Aires. El mismo establece aumentos de sueldos a sus ministros, al tiempo que otorga "una gratificación anual extraordinaria no remunerativa por cumplimiento de objetivos de gestión de hasta dos sueldos" a funcionarios PRO.
A partir del 1º de marzo de este año, el salario de un ministro pasará a ser de $10.958,20, mientras que desde el 1º de agosto será de $11.655,54, para finalmente elevarse desde el 1º de octubre a $11.904,59. El "bonus", en tantoe, alcanzará a los ministros, a los secretarios, a los subsecretarios y a directores generales (alrededor de 300 funcionarios).
El jefe de Gabinete porteño, Horacio Rodríguez Larreta, mano derecha de Macri, será el encargado de “dictar las normas reglamentaria , complementarias e e interpretativas necesarias a los fines del eventual otorgamiento" de la gratificación. En tanto, el ministro de Hacienda, Néstor Grindetti (responsable de anunciar el “impuestazo” del ABL el año pasado), con su firma, le terminó de dar forma al decreto.
Reacciones. Cuando se conoció la intención del mandatario porteño, el jefe de bloque K en la Legislatura, Diego Kravetz, calificó de "preocupante que Macri insista en gobernar la Ciudad como si fuera una empresa privada". Consideró "ridículo" que quisiera "pagar 'premios' a los funcionarios para incentivarlos a que hagan bien sus trabajos".
Aníbal Ibarra, líder de la bancada Diálogo por Buenos Aires, por su parte dijo que la propuesta se trata, en realidad, de "sobresueldos encubiertos" que se "parecen mucho a los premios" que "pactan los jugadores de fútbol" con los clubes. En un comunicado de prensa, Ibarra expresó que Macri busca "trasladar al Estado la lógica de los clubes de fútbol, en donde se paga según los resultados".