En el Gobierno creen que hay un sector de la Justicia que es proclive a fallar en su contra pero no consideran que ese accionar esté vinculado al intento K de “democratizar” el Poder Judicial. “Esto viene de antes”, dijo a PERFIL un importante funcionario del Gabinete. Reconoció que hay nuevos “operadores” o enlaces con los magistrados y que tienen que ver, fundamentalmente, con la ascendencia de La Cámpora hacia dentro del Gobierno. Hasta ahora, quien se encargaba de hacer lobby en los tribunales para Cristina Kirchner era Javier Fernández. Pero fue desplazado. Dos de los tres nuevos operadores responden al secretario de Justicia, Julián Alvarez, de La Cámpora. Se trata de Franco Picardi y Ernesto Kreplack. El tercero es Juan Martín Mena, jefe de gabinete del Ministerio de Justicia. En el Gobierno se niegan a reconocer que los cambios en Tribunales tienen que ver con el final de un ciclo y prefieren, en cambio, atribuirlo a las influencias del Grupo Clarín.
