Durante la inauguración de obras en La Matanza, y antes de partir a Cuba para ver al papa Francisco, Cristina Kirchner cargó ayer contra la Justicia tucumana por haber anulado las elecciones del 23 de agosto. Acompañada por Carlos Zannini -Daniel Scioli no fue porque sufrió una descompostura por “algo que comió-, CFK disparó que el fallo de la Justicia tucumana retrotrae el tiempo a épocas “predemocráticas”.
“De repente dos jueces deciden anular la voluntad de cientos de miles diciendo que hay algunos que no saben votar porque son pobres; estamos recordando épocas predemocráticas”, se despachó la jefa de Estado. “Ahora basta con dos jueces de forum shopping para que en una provincia se intente desconocer la voluntad popular”, dijo. Y cargó contra la oposición: “Perdieron y no soportaron perder”, se explayó. Las elecciones en Tucumán unieron a la oposición, que reclama transparencia y que se vuelva a votar. Hubo urnas quemadas y varias irregularidades que motivaron el fallo de la Justicia de esa provincia. Ahora el caso irá a la Corte Suprema local primero y, probablemente, a la nacional después.
En otro orden, después del fallo de la ONU sobre los fondos buitre, Cristina anunció el envío al Congreso de un proyecto que contiene los principios “para la reestructuración de la deuda soberana”
