El juez federal Claudio Bonadio, que investiga a la ex presidenta Cristina Fernández por traición a la patria por haber firmado el pacto con Irán, podría ampliar la investigación en su contra a raíz de las declaraciones que hizo el espía Antonio Stiuso en la causa por la muerte del fiscal Alberto Nisman.
Así se lo pidió al juez Bonadio el abogado Juan Lucas Magioncalda, titular de la ONG Ciudadanos Libres y denunciante original de esta causa, en la que fueron acusados la ex presidenta, el ex canciller Héctor Timerman y los legisladores que votaron el acuerdo con Irán.
Fuentes judiciales indicaron a DyN que el denunciante solicitó a Bonadio que le pida a su colega Julián Ercolini, a cargo de la causa por la muerte de Nisman, según lo dispuso la Corte Suprema la semana pasada, una copia de la declaración que prestó Stiuso el pasado 29 de febrero.
La semana pasada, el diario Clarín dio a conocer una serie de detalles de esa declaración que duró 15 horas ante la ex jueza de la causa, Fabiana Palmaghini, y estaba reservada por la ley de inteligencia.
En esa declaración, Stiuso habría dicho que la ex presidenta Fernández de Kirchner "le ordenó a través de sus jefes que frenara la investigación sobre Irán como autor ideológico del atentado" y refirió que el entonces secretario Legal y Técnico de la Presidencia, Carlos Zanini, le solicitó lo mismo a Nisman, recordó la presentación.
"Se advierte que la orden que habría dado la expresidenta resulta un elemento de suma importancia para la investigación del delito de traición. Ello es así en tanto una orden de este tipo solo puede entenderse como la prestación de ayuda o socorro a un país enemigo de nuestra Nación en tanto que la Republica Islámica de Irán es una potencia involucrada en un acto de terrorismo, perpetrado en nuestro territorio", dijo Magioncalda en el escrito al que accedió DyN.
Esta denuncia por traición a la patria sería de una de las puertas para reabrir la cerrada denuncia que hizo el fiscal Nisman cuatro días antes de morir contra la ex presidenta, Timerman y algunos allegados suyos por encubrimiento a Irán en el ataque.
Mientras, se espera que en los próximos días la Sala I de la Cámara Federal decida si reabre esa investigación en base a nuevas pruebas aportadas por la comunidad judía, en donde se incluye la grabación de una conversación entre Timerman y un dirigente de la AMIA donde el entonces canciller reconocía que Irán había estado detrás de la masacre que el 18 de julio de 1994 mató a 85 personas.