El gremio de Camioneros, conducido por Hugo Moyano, cumplió un paro de 24 horas en repudio al pago del Impuesto a las Ganancias, con un acto en Plaza de Mayo.
El paro se inició de hecho anoche en algunas ramas del gremio, y comenzó afectando el servicio de recolección de basura, de distribución de diarios, de alimentos en mercados, de combustible, correo y caudales.
La movilización tuvo que sortear un amplio operativo policial y las vallas que cubrían la Plaza de Mayo, especialmente en un amplio perímetro en torno a la Casa Rosada. La Policía Federal colocó vallas el viernes desde avenida Alem y Bartolomé Mitre hasta la calle Reconquista y, en el lado este, en Adolfo Alsina y Balcarce.
"A los trabajadores no hay que tenerles miedo, señora presidenta, hay que tenerles respeto", señaló Moyano, en un discurso dirigido a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, en referencia precisamente al vallado.
El líder de la CGT opositora sostuvo que la mandataria "está mal informada" con el tema del impuesto a las Ganancias porque "no creo que actúe por capricho". Luego acusó a la jefa de Estado de estar "creando condiciones como el neoliberalismo de otros años que nos arrebataba del pueblo la cultura del trabajo".
"Además del rechazo al Impuestos a las Ganancias", el reclamo sindical giró en torno a "la quita del tope de las asignaciones familiares, al mínimo vital y móvil de 5 mil pesos y al 82 por ciento móvil para los jubilados".
Apoyo de la CTA. El secretario general de la Central de Trabajadores Argentinos (CTA) opositora al Gobierno, Pablo Micheli, participó del acto en respaldo de los líderes camioneros Hugo y Pablo Moyano.
En diálogo con Radio 10, el sindicalista reconoció que hay "diferencias entre la CGT (que conduce Hugo Moyano) y la CTA", pero remarcó que "eso no impide que a la hora de defender los derechos de los trabajadores tengamos puntos en común". Micheli respaldó la medida de fuerza y aseguró que los problemas de los trabajadores "no tienen solución" con la administración kirchnerista.