Horacio Rodríguez Larreta sabía que su decisión de que las elecciones en la Ciudad de Buenos Aires fueran concurrentes, es decir, el mismo día pero separadas de las elecciones nacionales, le traería beneficios para su proyecto presidencial pero también una avalancha de críticas de Mauricio Macri y todo el aparato del PRO que incluye a Patricia Bullrich y María Eugenia Vidal, entre otros. Pero la primera consecuencia formal se podría ver en la Legislatura porteña, que lidera con comodidad el jefe de gobierno con un "quórum automático", y que podría perder esta condición.
"Si quiere tener quórum, lo tendrá que conseguir con el Frente de Todos", dijeron a PERFIL desde el entorno de Bullrich, titular del PRO que tiene el apoyo de tres legisladores que dejarían de facilitarle el tratamiento de leyes a Larreta en la Ciudad.
"Ya somos tres legisladores porteños, y con eso Rodríguez Larreta pierde el quórum automático, pero podríamos ser siete si no se establece un mecanismo claro de toma de decisiones", agregaron.
Los tres definidos son Juan Pablo Arenaza, Carolina Estebarena y Marilú González Estevarena. Pero hay otros tres legisladores que responden a Cristian Ritondo y María Eugenia Vidal, también molestos y disconformes con el anuncio de Larreta, dispuestos a sumarse a este bloqueo de quórum. Son Paola Michielotto, Daniel Del Sol y Mercedes De Las Casas. Incluso, aún no se ha manifestado, pero Roberto García Moritán, del espacio de Ricardo López Murphy, podría ser el séptimo tentado a revelarse.
No obstante, con los tres ya confirmados es un hecho que el larretismo tendrá que sentarse y debatir o buscar quórum con la oposición de la Ciudad para tratar sus leyes, ya que hoy cuenta con 32 legisladores a su favor, y con 31 es que accede a este "quórum automático".
Se trata del "primer pase de facturas formal" que recibiría Larreta, independientemente de la ola de críticas de Macri, Bullrich, Vidal, Ritondo, Jorge Macri, entre otros dirigentes.
Hoy, durante un zoom del PRO que estaba programado con anterioridad para debatir la agenda electoral, el jefe de gobierno porteño se ausentó acusando "cuestiones de agenda", mientras que desde su entorno deslizaron que no había sido avisado tampoco para participar, en un tenso clima que dejó el anuncio de este lunes 10 de abril. "Bullrich lo invitó, así que eso no es verdad", advirtieron a este medio.
Allí, Macri aprovechó para descargar su "enojo" y "desilusión" por tomar decisiones "solo y sin consultar". Tan sólo Diego Santilli y Eduardo Macchiavelli, por el lado de Larreta, estuvieron presentes para defender la decisión.
Los argumentos de Larreta para las elecciones concurrentes en CABA
Lo que públicamente eligió Larreta y su equipo para defender esta medida es que en 2015 Macri propuso desdoblar las elecciones y utilizar el voto mediante la Boleta Única Electrónica, y que en este caso las elecciones concurrentes implicarían que a pesar de ser elecciones separadas, serían el mismo día, evitando al electorado a votar hasta 6 veces en el año. Sobre el voto electrónico se hizo referencia como una modalidad "bandera" que impuso el macrismo en la ciudad y hasta en el código electoral de ese distrito, algo que de no respetarse, podría implicar un reclamo del radicalismo a la Justicia.
Sin embargo lo que esta decisión esconde es que Rodríguez Larreta se evita tener que decirle "no" a su socio radical Martín Lousteau, aspirante a sucederlo en la Ciudad. Es que Larreta mantendría su fidelidad al PRO y hasta tiene dos candidatos propios como sus ministros Acuña y Quirós para enfrentar a Jorge Macri en las elecciones primarias (PASO). El jefe de gobierno hoy introdujo incluso un posible conflicto jurídico de papeles que necesitaría tener el primo de Macri para ser candidato, algo que "deberá resolver la Justicia".
Si esto le sale bien a Larreta, no sólo evita romper su acuerdo con el radicalismo sino que podría llegar a las elecciones generales "emancipado" de Macri, como dijeron analistas políticos. El costo de esta decisión se podrá evaluar con el diario del lunes, pero ya muestra sus primeras heridas y reclamos de "traición".