El ex gobernador neuquino Jorge Sobisch fue citado a declarar el próximo martes en el marco del juicio oral que, en virtud del asesinato del docente Carlos Fuentealba, la justicia de su provincia lleva adelante por homicidio contra el ex cabo de la policía Darío Poblete.
Los jueces de la Cámara Primera del Crimen de Neuquén admitieron esta noche que citaron al ex funcionario en respuesta a un pedido del abogado que representa a los familiares de Fuentealba, que busca determinar si el ex gobernador ordenó la represión a la protesta de maestros en cuyo transcurso Fuentealba fue asesinado el año pasado.
El letrado Gustavo Palmieri, quien actúa como querellante en el juicio, pidió la citación de Sobisch "para determinar si hubo o no exceso en el uso de la fuerza" por parte de los policías que el día del hecho fueron dispuestos en la ruta 22, a la altura de la localidad de Arroyito, a fines de desalojar a los docentes que reclamaban aumentos.
La citación de Sobisch ya había sido reclamada en audiencias anteriores por el defensor del ex cabo Darío Poblete, Ladislao Simon, pero en esos casos fue rechazada por el tribunal. En esta oportunidad, la Cámara aceptó el pedido de la querella y dispuso que la declaración del ex mandatario se produzca el martes, a partir de las 9.30.
La querella intenta que comparezca Sobisch, quien no cuenta con fueros parlamentarios ni como funcionario provincial, porque considera que los policías actuaron con una orden de reprimir cualquier intento de los docentes por cortar las rutas.
Esa hipótesis fue ratificada ayer por el subcomisario José Flores, quien integraba la Policía Metropolitana, cuando dijo ante el tribunal que la noche previa a la represión se reunió en la rotonda de Arroyito con el comisario inspector Juan Carlos Escobar, quien le informó que tenía directivas precisas de no dejar cortar en ese sector.
La fiscalía le preguntó a Flores si recordaba de quién venía la orden y el subcomisario indicó: "Si mal no recuerdo, me dijo que del gobernador".
La viuda de Fuentealba, Sandra Rodríguez, intenta junto con el gremio docente ATEN que la justicia lleve adelante un segundo juicio para determinar las responsabilidades políticas del crimen y por las cuales acusan al ex gobernador Sobisch.
Por otra parte, en la audiencia de hoy, la 12ª del proceso, declaró un perito forense que realizó la autopsia al cuerpo de Fuentealba y que aseguró que al docente le dispararon con la escopeta lanzagases a unos "siete metros de distancia".
Varios policías dijeron en las audiencias anteriores que la distancia aconsejada por los expertos para disparar ese tipo de armas con el fin de dispersar multitudes era de 80 metros.
El perito Carlos Losada ratificó que Fuentealba falleció "por el disparo de una granada de gas lacrimógeno", que fue efectuado "a corta distancia, unos siete metros" y "en dirección directa al auto".
Del proyectil, dijo, "impactó el plástico y no el aluminio con la fuerza suficiente como para producir el daño" que provocó la muerte del docente.
Otros efectivos que participaron del operativo de represión también declararon hoy en la audiencia y confirmaron que vieron a gran cantidad de jefes de la fuerza de seguridad en la zona, lo que según admitieron no era habitual.
Fuente: DyN.
