Mientras el kirchnerismo se empeña en defender al vicepresidente Amado Boudou, citado a indagatoria por el Caso Ciccone, el diputado Carlos Kunkel fue más allá y apuntó contra el juez Ariel Lijo, que lleva adelante la causa.
El legislador advirtió que "cuando terminen las actuaciones" judiciales del caso, "si son correctas", el magistrado "tendrá el reconocimiento". "Si no tendrá la investigación del Consejo de la Magistratura que corresponda", advirtió.
"Pero en este momento considero que no tengo que opinar", se excusó luego Kunkel en declaraciones a Radio América. "No conozco el expediente, no quiero opinar sobre eso porque no quiero aparecer tampoco presionándolo", equilibró.
El diputado calificó al vicepresidente, que debe comparecer ante la justicia el próximo 15 de junio, como su "amigo y compañero" y sostuvo que la causa está influenciada por los "grandes grupos económicos" a los que supuestamente se opone.
"El expediente judicial de mi compañero y amigo Amado Boudou no lo he visto. Lo que todos queremos es que haya un procedimiento que no esté influenciado por los grandes grupos económicos que le quieren facturar a él el hecho que les sacó el negociado absoluto que tenían con las AFJP, porque fue él el que generó la acción", argumentó.
"Las cuestiones judiciales hay que dirimirlas en los tribunales. Los grandes medios concentrados se han dado por hacer campañas mediáticas muy intensas", continuó Kunkel, que también denunció "presiones sobre los miembros del Poder Judicial".