La obra que el Gobierno define como “la más importante de la gestión” reunió al Presidente y dirigentes que se venían apuntando entre sí. El anuncio del inicio de la construcción del gasoducto Néstor Kirchner en Vaca Muerta hizo posible que Alberto Fernández compartiera un acto con el sector energético representado por funcionarios kirchneristas. Eso sí, no hubo foto conjunta.
“Tregua interina” es como se define por estas horas el vínculo entre el gabinete energético y el Presidente. Este sector mantiene fuerte diferencias con la gestión económica de Martín Guzmán y su intención de aumentar las tarifas de gas y luz en 60% promedio para el 80% de los usuarios.
Se trata de los funcionarios no alineados según la descripción de Guzmán. "Vamos a gobernar con los que estén alineados al modelo económico", dijo el ministro. Apuntaba, entre otros, al secretario de Energía, Darío Martínez, al titular de Energas, Federico Bernal, pero sobre todo a al subsecretario de Energía Eléctrica Federico Basualdo. Lejos de haber cambios de gabinete y estos funcionarios ser removidos, este jueves los tres dijeron presente en el acto encabezado por el Presidente.
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“Es la obra más importante de este gobierno. Significa el autoabastecimiento de energía y gas en medio de una crisis energética, no va a haber obra más trascendente que esta. Solo el primer tramo significan 10 millones de metros cúbicos por día, más de la mitad del contrato con Bolivia y el primer tramo va a estar listo antes del invierno que viene”, dicen desde la secretaría de Energía para explicar esta tregua.
La disputa latente es por las tarifas
Desde Energía piden que si avanza con los incrementos, sea Guzmán quien presida las audiencias para la actualización de los montos de luz y gas oficializadas días atrás. Parece que el ministro de Economía aceptó poner la cara y eso tranquilizó las internas.
En las últimas horas, la Casa Rosada dio por ganada la discusión al lograr que Darío Martínez convoque a las audiencias. El funcionario fue puesto allí por Máximo Kirchner, pero hace equilibrio porque tiene aspiraciones como candidato a gobernador en Neuquén en donde tiene disputas con Oscar Parrilli. De todos modos, desde el Instituto Patria aseguran que sigue respondiendo al apellido Kirchner.
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Martínez llegó este jueves a Vaca Muerta con la comitiva oficial, un gesto del presidente subirlo al avión y más tarde compartir el escenario con él. En las primeras filas estuvieron Federico Basualdo, el más apuntado por el ala albertista, y Federico Bernal.
En las últimas horas, en el entorno del Presidente hablaban bien de Martínez reconociéndolo como un cuadro técnico, pero tildan de “pibito militante que no sabe de lo que habla” a Basualdo, tampoco tienen palabras de elogios para Bernal, también presente en el acto. Estos funcionarios llegaron el miércoles a Neuquén.
Hoy esas diferencias tuvieron un intervalo por decisión del Presidente pero también de la Vicepresidenta que ordenó dar el presente a sus funcionarios y no avanzar en críticas. De todos modos, no hubo foto conjunta. Ninguna de las tres imágenes que envió presidencia muestran a Martínez, quien estuvo en el escenario con Fernández. Tampoco se los ve a Basualdo ni a Bernal. Nadie se anima a arriesgar si esta tregua llegó para quedarse.
ra / ds
