Finalmente y tal como había anticipado PERFIL, el gobernador Juan Manzur convocó para el 11 de junio las elecciones en Tucumán. En conferencia, calificó como “prudente” la fecha elegida. En el Frente de Todos entienden que los comicios de la provincia del norte serán un punto de inflexión para el reacomodamiento de la discusión nacional y comenzarán a decantar las candidaturas. Incluso así lo entienden en el entorno de la vicepresidenta, Cristina Kirchner. Los mandatarios provinciales tallarán fuerte en la discusión por los nombres.
La fecha escogida no es casual. Coincide con las elecciones generales en Corrientes, (donde no se elige gobernador) y con las PASO en Mendoza. En ambas provincias gobierna el radicalismo y Juntos por el Cambio se encamina a sólidos triunfos que cortarían la racha de victorias peronistas o bien de aliados del oficialismo que se vienen sucediendo en las provincias
También habrá elecciones en San Luis, en donde Alberto Rodríguez Saá no irá por un nuevo mandato y la elección asoma competitiva frente al candidato de JxC, Claudio Poggi.
Tucumán es el sexto padrón electoral del país con más de un millón de electores y un histórico bastión del peronismo. Manzur dejó su lugar en la fórmula a Miguel Acevedo, un hombre de su riñón. Una manera tácita de reconocer que su candidatura podría haber sido anulada por la Corte Suprema, que nunca se expidió respecto de la cuestión de fondo.
Hasta acá, el peronismo tuvo sólidos triunfos en La Rioja, La Pampa y Tierra del Fuego. También revalidó credenciales en San Juan a nivel municipal, salvo en la capital donde perdió. Con la cúpula del Frente de Todos enredada en internas y con una economía desordenada, se esperaba en la previa que los oficialismos provinciales fuesen castigados en las urnas. Eso no pasó. También ganaron los aliados de la Casa Rosada: Salta, Río Negro y Misiones; en todos los casos con holgadas diferencias. La nota discordante la puso Neuquén con el triunfo de Rolando Figueroa, que en definitiva no es más que un desprendimiento del propio MPN.
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El peronismo de Tucumán se muestra confiado. Este sábado, Manzur, Osvaldo Jaldo, Miguel Acevedo y la candidata en la capital, Rossana Chahla, mantuvieron recorridas y se reunieron con más de 350 militantes. Aseguran que la decisión de la Corte Suprema no afectará la decisión de los tucumanos y que únicamente demoró los comicios. Creen además que la elección en la capital estará reñida y podrían recuperarla. La proyección de Manzur en la escena nacional quedó suspendida. Reconocen que se le “acortaron los tiempos” al exjefe de Gabinete. Pese a ello, Manzur buscará entre el 11 y el 24 (cuando cierran las listas) su lugar en la discusión nacional.
Con Tucumán ratificado, los mandatarios del peronismo comenzarán a ordenarse en la discusión nacional, ya con Cristina corrida de cualquier candidatura, no así de la discusión por la confección de las listas.
En junio también habrá elecciones en Chaco (PASO). Una parada importante para el FdT que tiene en Jorge Capitanich un puntal importante. También habrá en Córdoba, en donde Juan Schiaretti se juega buena parte de su suerte nacional mientras coquetea con la idea de un “frente de frentes”. Formosa será otra provincia que renovará autoridades, en donde Gildo Insfrán irá por un nuevo mandato.
Los resultados negativos para el peronismo podrían venir en julio. Habrá PASO en Santa Fe el 16, y PASO en Entre Ríos el 30. En ambos casos no solo JxC tiene altas chances de ganar, sino que en ambas gobierna actualmente el FdT. Ambas provincias de la región central podrían representar duros golpes para el oficialismo en la antesala de las PASO nacionales.
