El titular de la Fiscalía Federal Nº 7, Ramiro González, imputó ayer al ex candidato a diputado nacional de Cambiemos Fernando Niembro por lavado de dinero en el expediente que tramita el juez Sebastián Casanello. Sin embargo, no hizo lugar al pedido de la Procelac para que sean investigados en una misma causa los funcionarios porteños que firmaron contratos con la empresa del periodista.
La acción penal se extiende también al socio de Niembro, Alberto Meza, con quien fundó en 2012 La Usina Producciones, la firma que logró al menos 170 contrataciones directas de la administración porteña por más de $ 20 millones. En su escrito, el fiscal pidió una batería de medidas de prueba sobre datos patrimoniales, fiscales y bancarios. No se incluyó en el texto de González ningún pedido de información al gobierno porteño. Sin embargo, fuentes de la administración macrista indicaron a PERFIL que estaban siendo enviados al juzgado todos los contratos de publicidad con la firma de Niembro.
El proceso se inició a partir de una denuncia de la Procelac hecha por su titular, Carlos Gonella, y el fiscal ad hoc Milton Khaski sobre la base de información revelada por Tiempo Argentino.
La investigación se nutrió de la normativa de contrataciones porteña, datos fiscales, societales y un informe de la legisladora Gabriela Alegre (FpV). La Procelac pedía una investigación conjunta de los posibles delitos cometidos por funcionarios porteños. Un requerimiento que fue desestimado por el momento, aunque González aclaró en su escrito que la imputación contra Niembro se realiza “sin perjuicio de que eventualmente en el desarrollo de la instrucción se pueda ampliar el objeto procesal”.
Deprimido. Tras su renuncia, Niembro se refugió en la intimidad de su casa. Fuentes del PRO contaron a PERFIL que su familia fue clave a la hora de tomar la decisión de excluirse de la lista de postulantes a diputados. Su hijastra, la comunera Natalia Persini, fue una de las voces a favor de abandonar la carrera proselitista. En la decisión, agregaron, también influyeron algunas columnas de opinión en los principales diarios del país.
“A esta altura de mi vida no tengo por qué estar pasando por todo esto”, fue lo que le dijo el periodista a Mauricio Macri antes de dar a conocer la carta de renuncia. Sus últimas recorridas por la Provincia habían transcurrido entre algunos reproches de vecinos y el rechazo de ciertos candidatos a intendente de Cambiemos, que entendían que Niembro perjudicaba su imagen.
“Está con el ánimo por el piso”, contó un empresario y amigo de Niembro. El periodista está deprimido y sin actividades sociales. De hecho, el pasado miércoles faltó al festejo de cumpleaños de su amigo el empresario Carlos Spadone, al que había tenido asistencia perfecta desde hace cuatro años, cuando la celebración comenzó a llevarse a cabo en un conocido reducto del Bajo Flores. Allí hasta que las achuras comenzaron a llegar a los platos, un lugar en la mesa principal estuvo reservado para Niembro. En su posterior discurso, Spadone lo recordó con cierta acidez: “Les agradezco a los que vinieron y también a los que no pudieron, por el sismo o el motivo que fuera”, dijo entre risas mientras levantaba la copa.
