En la madrugada del domingo 27 de diciembre, Martín y Cristian Lanatta junto a Víctor Schillaci, los tres condenados por el triple crimen de General Rodríguez, se escaparon del penal de General Alvear, en la provincia de Buenos Aires. Cuando salieron, los esperaba una camioneta negra. Nadie los persiguió. Estuvieron trece días prófugos evadiendo a la Policía de la Provincia de Buenos Aires, a la Policía Federal, a la Gendarmería y a los espías de la AFI. Cayó Martín Lanatta en Santa Fe. A los otros dos los buscaban las fuerzas provinciales y federales al cierre de esta edición.
Hubo una red de cómplices que les permitió a los tres prófugos mantenerse al margen de la ley tanto tiempo. De esa red, algunos están presos y tienen conexiones con la política. Uno de ellos es Marcelo “el Faraón” Melnyk, quien los recibió en su quinta de Florencio Varela no bien escaparon de la cárcel.
Melnyk está ligado al kirchnerismo en el sur del Gran Buenos Aires. El hermano de Víctor Schillaci, Franco, también fue arrestado. Hubo varios allanamientos en propiedades de la familia Lanatta en Quilmes, pero lo más importante: las autoridades bonaerenses descabezaron en el medio de la búsqueda a la DDI de Quilmes, por sospechar que protegía a los criminales.
Es que los prófugos fueron vistos por testigos en ese distrito moviéndose como si fueran inocentes ciudadanos. Hasta Berazategui, distrito pegado a Quilmes, llegó por ejemplo Schillaci que, a punta de pistola, le sacó la camioneta Kangoo a su ex suegra. Fue a pocas horas de haberse tiroteado con policías en la localidad de Ranchos.
Después, algo los llevó a la provincia de Santa Fe. El primer rastro apareció el jueves, cuando se tirotearon dos veces con Gendarmería. Los efectivos encontraron en la localidad de San Carlos un galpón que les servía de refugio. ¿Quién se los proveyó?
En la capital de Santa Fe mantuvieron a un ingeniero de rehén durante varias horas, hasta que decidieron escapar con rumbo a Cayastá, donde fueron capturados después de un vuelco.
Los investigadores deberán determinar ahora si los Lanatta y Schillaci fueron ayudados por parte de la Policía Bonaerense y por alguna estructura del narcotráfico para permanecer prófugos durante dos semanas.
Ayer seguía la búsqueda de Cristian Lanatta y Víctor Schillaci, en las cercanías de Cayastá, en Santa Fe, donde fue encontrado Martín Lanatta por la mañana.
Al cierre de esta edición no habían sido encontrados.