Los improvisados festejos que ayer sonaban en el búnker de la alianza de izquierda en Córdoba, una vez cerrado los comicios se fueron diluyendo con el correr de las horas y finalmente el Frente de Izquierda y de los Trabajadores (FIT) se quedó a un paso de acceder a una banca en el Congreso de la Nación.
Liliana Olivero, cabeza de lista del FIT, una vez conocidos los resultados expresó su malestar y denunció que hubo fraude electoral. "No vamos a dejar que nos arrebaten y nos roben la banca", anticipó.
En una disputada elección, el FIT obtuvo 145.238 votos (7,48%) frente a los 440.452 que recibió la Unión Cívica Radical (UCR)para tres candidatos, lo que dibuja una diferencia de casi 1400 votos entre la candidata Liliana Olivero y el tercer candidato radical, Diego Mestre.
En este contexto, el FIT acusa que se produjeron numerosas irregularidades a lo largo de todo el escrutinio y anticipó que acudirán a la Justicia Electoral Federal para perdir que se abran las urnas y recuenten los votos.
“Hay cosas que no se explican. A las 23, con un 94% de las mesas escrutas, el FIT tenía una banca, después hasta el 97% lo veníamos perdiendo y se clavó el escrutinio en un 97,2%. Vamos a acudir a la Justicia Electoral y pedir que se abran las urnas para contar voto por voto”, aseguró Olivero.
“Hubo un montón de irregularidades: la mezcla de boletas, una resolución que no fue acatada por muchos presidentes de mesa, se les impidió el ingreso a los fiscales, entre otras cosas” completó. Por tal motivo los partidos de izuierda convocaban a una marcha para el lunes a las 18, desde calles Colón y General Paz, en pleno centro de la capital cordobesa.