El obispo de la diócesis de esta ciudad, Marcelo Martorell, abogó hoy por el fortalecimiento de la democracia y evitó al destacar la importancia de las próximas elecciones legislativas, durante la homilía que pronunció en el Tedeum celebrado aquí con motivo de conmemorarse un nuevo aniversario de la Revolución de Mayo.
"A poco tiempo de las elecciones nacionales legislativas es bueno dar gracias a Dios por la democracia", afirmó monseñor
Martorelli, ante la presidenta Cristina Kirchner, los miembros del gabinete nacional; gobernadores, legisladores, autoridades
judiciales y de las fuerzas armadas. El prelado, oró además por el "proyecto de vida político económico, social" argentino, para que "fortalezca la democracia" en nuestro país.
Del Tedeum, que contó con la presencia del Nuncio Apostólico Monseñor Berardini, participaron además, el gobernador de
Misiones, Maurice Closs, junto a sus pares Daniel Scioli (Buenos Aires), Jorge Capitanich (Chaco); Gildo Insfrán (Formosa), y
representantes del cuerpo diplomático, que previo al oficio religioso participaron de la ceremonia del saludo protocolar que
la Presidenta encabezó en el Hotel Sheraton.
En otro pasaje de una alocución, Martorelli, sin incomodar en ningún momento a la Jefa de Estado, pidió tener una "mirada de
esperanza", tras considerar que debemos "aprovechar las oportunidad que se nos da" y subrayar "creemos estar ante una
oportunidad única", apoyando esa reflexión en la "crisis moral global". Asimismo, Martorelli criticó "las posturas intransigentes" de algunos, que si bien no mencionó a nadie en particular, no pasó desapercibido, tras contextualizar sus palabras en las elecciones del 28 de junio.
En la mayor parte del Tedeum, monseñor Martorelli se remitió al evangelio y la relación de la Iglesia con el surgimiento de la
Patria. Pero, también se refirió a la "prudencia de los gobernantes" y la "honestidad de sus ciudadanos", para afianzar "la justicia" y pidió que el "bien común, sectorial y personal" propicie a "esta joven democracia que se va reafirmando" y que "logre
trascender las barreras que nos impiden crecer".
Además, se pronunció en la necesidad de "buscar el bien y la paz" para que "nuestros corazones busquen una luz esperanzadora y
la construcción del bien común en nuestra Patria" y "beneficiar a todos sectores de la sociedad. "Queremos mirar hacia el futuro con esperanza, sin olvidar el camino recorrido por los hombres de nuestra patria", afirmó el Obispo, quien al término de la ceremonia saludó a la Presidenta, quien de este modo dio por superado el estigma con la diócesis de Puerto Iguazú, mientras estuvo a cargo del obispo Piña, fuerte critico del gobierno durante la administración de Néstor Kirchner.
Fuente: Noticias Argentinas