PROTAGONISTAS
en problemas

La muerte de Débora Pérez Volpin puso bajo la lupa al Sanatorio de La Trinidad

Julio Fraomeni, su titular, maneja uno de los imperios de la salud prepaga nacional y está expandiendo su negocio a las finanzas. Guarda bajo perfil y en 2015 se declaró macrista.

1102_sanatorio_trinidad_cedoc_g.jpg
Julio Fraomeni, su titular, maneja uno de los imperios de la salud prepaga nacional y está expandiendo su negocio a las finanzas. Guarda bajo perfil y en 2015 se declaró macrista. | cedoc

El Sanatorio de la Trinidad, que se transformó en foco de atención tras la muerte de la periodista Débora Pérez Volpin, es el emblema de la prepaga Galeno, un imperio de los negocios de la salud que se expande hacia las finanzas de la mano de su dueño, Julio Fraomeni.

Justamente, todo comenzó con la Clínica La Trinidad en Quilmes, fundada en 1982 y transformada de la mano de Fraomeni en una referencia de la atención médica de la zona sur del Gran Buenos Aires. Desde entonces, empezó a crecer a través de una agresiva política de adquisiciones. Primero, le compró TIM y Galeno Life a The Exxel Group, y luego absorbió AMSA, propiedad del holding ING. La desregulación del sistema de obras sociales en los años 90 les permitió a las prepagas empezar a aliarse con sindicatos para que los empleados derivaran sus aportes a cubrir planes privados.


Con Messi incluido. Con esa explosión del modelo prepago, Galeno terminó de sumar unos 750 mil afiliados, y pelea el segundo lugar con Swiss Medical, detrás de OSDE. Ya tiene siete sanatorios La Trinidad, entre ellos el ahora tristemente célebre en Palermo, y tambien otros 17 centros médicos. El momento de mayor crecimiento y popularidad de Galeno se dio durante los largos años en los que tuvo como imagen de la marca nada menos que a Messi, que recomendaba con un “Ponete la camiseta” el primer plan médico de los jóvenes de 18 a 25 años. Las empresas de medicina privada atienden a casi 6 millones de personas y mueven unos $ 100 mil millones al año. El Grupo Galeno factura unos $ 15 mil millones.

En el área de salud aducen una rentabilidad del 3%, atada a las actualizaciones periódicas de las cuotas. Por eso, los empresarios de ese ramo, como Fraomeni, viran desde hace tiempo al universo de los seguros y los créditos, que explica aproximadamente la otra mitad de los ingresos del grupo, pero con una rentabilidad mayor, del 5%. Así, por ejemplo, se quedó en 2011 con Consolidar ART y luego con la española Mapfre, y ahora tiene 200 mil pymes como clientes en su negocio de seguro de riesgos del trabajo Galeno ART, donde respalda a más de 1,3 millones de empleados, que se suman al mundo Galeno Life, la compañía de seguros de vida. Con todo ese universo de datos de ingresos y gastos de personas y empresas que contratan sus servicios de salud y seguros, el próximo paso de Galeno era inevitable: ir hacia las finanzas.


Salud y finanzas. Estos días, mientras estallaba la noticia de la muerte de Pérez Volpin y La Trinidad era allanada por la Justicia, que investiga bajo la carátula de “homicidio culposo”, se completó el desembarco del holding en el universo de las finanzas, al cerrarse la compra de Efectivo Sí, la financiera que era del Banco Galicia. El objetivo es hacer “venta cruzada”, es decir, ofrecer préstamos a sola firma desde esa casa de créditos, que hoy tiene 94 sucursales y fondos en la calle por $ 8 mil millones.

De extremo perfil bajo, Fraomeni pocas veces se muestra en público y menos opina de actualidad. Una de ellas fue en septiembre de 2015: “De ganar Macri, sería todo más fácil, porque piensa como nosotros y quiere un país más normal, donde el privado pueda hacer”.