Rodeados por amigos, familiares y futbolistas, Luis Suárez y su esposa, Sofía Balbi, renovaron sus votos matrimoniales con una ceremonia religiosa en un hotel de La Barra, en Punta del Este. Acompañados por sus tres hijos, Delfina, Benjamín y Lautaro, Suárez y Balbi celebraron esta segunda boda con una fiesta para 160 invitados, quienes –como ya estilan aquellos que prefieren la privacidad total– pudieron ingresar al lugar con la consigna de dejar sus teléfonos celulares.
El lugar elegido por los novios fue el Hotel Fasano, ubicado a 20 kilómetros del centro de la ciudad balnearia y a unos 150 kilómetros de Montevideo. Una noche aquí no cuesta menos de 800 dólares.
Pasadas las 19 horas, se dio inicio a la ceremonia con el intercambio de alianzas caladas con sus respectivos nombres, confeccionadas con oro blanco y brillantes. Al culminar este acto, oficiado por el cura Juan Andrés Verde, Agustín Casanova y la intérprete y actriz argentina Maia Reficco cantaron I’m yours de Jason Mraz, el mismo tema que la pareja eligió cuando se casó hace 10 años. La velada continuó con una cena y una fiesta en la otra ala del hotel. Allí se montó una carpa completamente transparente, con paredes y techos acristalados. “Las servilletas y otros detalles para los invitados incluyeron el monograma con las iniciales del matrimonio”, contaron desde la organización de la fiesta.
En un breve contacto con la prensa, Balbi recordó que están junto al jugador del Barça desde hace 17 años, y casados desde el 2009. Consultada por la diferencia con su boda anterior, expresó: “Un montón, más que ahora están los nenes. Es lo más lindo para los dos”.
Durante la cena, la uruguaya Manuela Bervejillo deleitó a todos los invitados con su voz. A medianoche fue el turno de la mundialmente conocida cantante colombiana Karol G. El cierre de la velada estuvo a cargo del cantautor y músico argentino Pablo Lescano.
La boda tuvo la presencia de grandes jugadores de fútbol, entre ellos Lionel Messi, quien concurrió junto a su esposa Antonella Rocuzzo y su hijo mayor Thiago. Los Messi llegaron en un vuelo privado que previamente se detuvo en Rosario, donde pasaron la Nochebuena y de ahí partieron directamente hacia Punta del Este. Messi apostó a un esmoquin en azul Francia, con camisa blanca y corbata plateada, y Antonella Roccuzzo lució un vestido en rosa viejo, con escote en V bordado, de Natalia Antolin.
La otra argentina que se destacó fue Maru Botana, elegida por la pareja para realizar parte del catering del evento. En su cuenta de Instagram publicó tres de los postres que estarían en la mesa dulce; entre ellos una chocotorta y una tarta de manzanas acarameladas y almendras.
Entre los jugadores famosos estuvieron presentes Neymar, Diego Forlán, Sebastián “El Loco” Abreu, Diego Lugano, Cristian “Cebolla” Rodríguez, Nicolás Lodeiro, Diego Laxalt, Walter Gargano y Diego Godín.
A Suárez se lo vio visiblemente emocionado de poder realizar esta segunda boda en su país. “Se da la posibilidad de poder disfrutar en familia, entre amigos, y tener una linda experiencia. Que mis hijos disfruten de este lindo momento”, expresó el jugador, quien vistió un traje de color azul de Dolce & Gabbana. Por su parte, Balbi lució dos vestidos de la firma española Yolancris. Para la ceremonia eligió un vestido con un toque clásico, con transparencias, corte sirena y escote halter. La segunda pieza para la fiesta fue un vestido con geometría art decó donde se mezclaba un encaje lencero con tiras de algodón, adornado con flores 3D y accesorios color oro.
Párrafo aparte, la presencia de decenas de curiosos, quienes se acercaron hasta la entrada del hotel. Fue el novio quien tuvo el gesto de firmar algunas camisetas de los presentes, entre ellos la de un niño que se apostó en el lugar desde el mediodia. Un efectivo de seguridad fue el nexo que permitió cumplir el sueño del chico.
