No fue hace mucho cuando, en una rueda de prensa le preguntaron cuáles eran sus referentes. De la boca de Floyd Mayweather no salió el nombre de Cassius Clay. Ni siquiera, el de Mike Tyson. No; el boxeador del momento dijo que admiraba a Bill Gates, Steve Wynn y Carlos Slim, entre otros empresarios megamillonarios. Excéntrico, de modales exagerados, expansivo, y extrovertido, Mayweather es dueño de una fortuna que asciende a los 900 millones de dólares. No por nada, lo apodan Money.
Con un récord de 47 victorias y cero derrotas, se enfrentará hoy en Las Vegas a Manny Pacquiao, en lo que muchos denominaron “la pelea del siglo”, que mover una cifra record entre la venta de entradas, derechos televisivos, publicidad y apuestas. Su éxito arriba del ring decantó en millones de dólares que, además de mostrarlos literalmente en las redes sociales, los gasta en autos de ediciones limitadas, zapatillas customizadas, avión privado, joyas y otras excentricidades como, por ejemplo, pagar 50 mil dólares en una lapicera sólo para firmar el contrato de la pelea de hoy para después guardarla como objeto de colección.
El dinero ganado en su carrera lo exhibe para sus seguidores en Instagram y Twitter: se muestra contando fajos de 10 mil dólares como en las películas de gángsteres tanto como delante de los que tituló “su mundo”: un Gulfstream 450, tres Ferrari, tres Bugatti, un Lamborghini y un Porsche. Todos vehículos de una larga colección que además incluye, McLaren, Mercedes-Benz, Bentley y Rolls Royce. Y, parece, les gusta ordenarlos por color: en su mansión de Miami, la flota es blanca; mientras que, en Las Vegas, son todos negros. Es en esta última propiedad, donde pasa la mayor parte del tiempo: tiene 1.858 m2, repartidos en cinco dormitorios, siete baños, una sala de cine, una gran oficina, un gimnasio, una pileta, un sauna y un vasto jardín. Esa mansión está valuada en 10,5 millones de dólares.
Otro de los lujos de Mayweather son los relojes, tiene cientos y de los más caros. En su cuenta de Instagram, exhibió su colección de joyas con diamantes valuada en 64 millones de dólares. “Se trata de tener opciones”, escribió en la imagen. La locura material tiene su derrotero también en las zapatillas, las mismas que compra de a treinta pares cuando va de shopping, y que luego exhibe en pilas de cajas sin usar y que, en general, termina regalando.
Vida. Floyd Joy Mayweather Jr. nació en Michigan, el 24 de febrero de 1977. Es hijo y sobrino de boxeadores. Debutó el 11 de octubre de 1996, ganándole a Roberto Apodaca por KO. En octubre de 1998 ganó su primer título mundial, al vencer en el octavo round a Genaro Hernández, y ese título lo defendió en ocho oportunidades. De ahí en más, no paró. Fue campeón mundial once veces y en cinco categorías distintas: superpluma, ligero, superligero, welter y superwelter.
Fue en mayo de 2014, cuando enfrentó al campeón mundial welter de la Asociación Mundial de Boxeo, Marcos Maidana. Si bien durante el combate el argentino sorprendió por su despliegue, él le ganó por pocos puntos en una decisión dividida por los jueces. Después de aquel cuestionado triunfo, se enfrentaron por segunda en septiembre: ganó por decisión unánime del jurado.
Celebrity. Hoy, el status que posee de ser el boxeador con mejores desplazamientos constantes en el ring, lo convierten en el tercer mejor deportista pago del mundo según Forbes (ver recuadro). Pero Mayweather no sólo exhibe su dinero, también lo comparte.Puede gastar miles de dólares en una sola noche en centros nocturnos o restaurantes. “Hoy invita Floyd”, es la frase que repite cuando llega. Otro pasatiempo son las apuestas. En la temporada pasada de la NBA apostó por Miami y ganó alrededor de 11 millones de dólares. En la definición de la NFL le adjudicaron una suma de 22 millones puesta en juego.
La exposición con famosos es parte de su vida: Justin Bieber, Jack Nicholson, Jon Voight, Heidi Klum, Denzel Washington y Michael Phelps, posaron con y para él.
