Primero, la ceremonia secreta. Luego, el civil y, ayer, finalmente, la celebración de la boda. Así, Darío Lopérfido y Esmeralda Mitre decidieron coronar éste “sí quiero”, luego de ocho años de noviazgo. La cita fue a las 18 horas en el Tenis Club Argentino de Palermo.
Allí, concurrieron familiares y amigos de los novios. Distintas personalidades de la política y el espectáculo dijeron presente, entre ellos: Carla Peterson y Martín Lousteau, Mike Amigorena y Mónica Antonópulos. También pudo verse a “Lilita” Carrió entrar a las apuradas. Aito y Antonio, los hijos del ex presidente, Fernando de la Rúa, también estuvieron invitados. Quien apareció tratando de no ser visto fue Héctor Magnetto.
Esmeralda Mitre eligió para esta ocasión un vestido de su íntimo amigo, el diseñador Manuel Lamarca.
La ceremonia secreta se había llevado a cabo unos días antes, en la Parroquia Santo Domingo de Guzmán y ante dos amigos de la pareja como testigos: el gerente de comunicaciones de Clarín, Martín Etchevers y María Videla Rivero, quienes leyeron las intenciones. Dicen que no hubo nadie más, sólo una vecina de la parroquia quien cantó Te quiero, de Mario Benedetti. Al terminar la ceremonia, los novios fueron a almorzar. “Nos casamos a escondidas, y ahora compartimos el civil con todos los amigos”, contó Esmeralda el jueves pasado, luego de entrar al Registro Civil de la calle Uruguay donde a las 13:30 firmaron la libreta roja. La actriz lució un mono de crêpe marroquí blanco y una corona de hojas verdes de Carolina Müller.
