PROTAGONISTAS
LA DECLARACIN ANTE LA JUSTICIA

“Para mis hijas pasé a ser una loca desquiciada y Loli, una ‘grosssa’”

La ex de Jorge Rial se defiende ante la acusación por "extorsión". Galería de fotos

Según D’Auro, las adolescentes “se sublevaron” en su contra con la “abierta complicidad del padre”.
| Cedoc

Cada uno está en una esquina del cuadrilátero y espera paciente a que el otro baje la guardia para asestar un golpe. Desde que se separaron, Jorge Rial y Silvia D’Auro han tenido escasos momentos de tregua y muchos de tensión; conocen sus puntos débiles y los expusieron en sus respectivas cuentas de la red social Twitter y también en los medios; luego ante la Justicia, donde ya cuentan con causas en lo civil, en lo comercial y en lo penal. En este último caso fue Rial quien la inició bajo la figura de extorsión a raíz de unas declaraciones que su ex dio a la revista Noticias.

En la nota que motivó la mencionada querella se anuciaba que D’Auro denunciaba “la red de funcionarios clave y presidenciables que pagan un canon mensual a cambio de la protección periodística del conductor”.

Esto no les gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
Hoy más que nunca Suscribite

La primera fecha de la citación a D’Auro por esta causa de extorsión fue el martes 28 de mayo de 2013 pero postergación mediante, asisitó el pasado 25 de junio. Y finalmente, no declaró. En cambio, presentó un escrito del que PERFIL extractó algunos fragmentos en esta nota. “El permanente hostigamiento y descalificación hacia mi persona (...) que mi cónyuge se encargó de producir a partir de entonces, a través de manifestaciones vertidas en los programas televisivos y publicaciones en que él mismo interviene me impulsaron a abandonar el silencio que me había impuesto, para responder a las actitudes que no sólo afectaban mi honra.(...) Fue con ese propósito que accedí a mantener la entrevista que reiteradamente me propusiera la revista Noticias,(...) en el curso de la cual hiciera referencia a las presiones de Rial a las que estaba siendo sometida y a la forma en que era humillada por éste”, dice D’Auro en el escrito presentado. También niega la acusación que su ex le hizo para fundamentar la querrella por extorsión: la de expresar que él recibía dinero a cambio de protección a políticos.

En el escrito ella señala que “a fin de reconstruir la realidad de lo sucedido –lo que permitirá verificar que no he incurrido en delito alguno-, corresponderá tomar en cuenta el contexto completo que resulta de la desgrabación de las entrevistas y no la versión editada (...). Ello permite constatar que el propósito por mi parte fue aclarar cuestiones vinculadas con las descalificaciones y ofensas a que estaba siendo sometida por parte de mi cónyuge”.

Todos contra ella. Esta presentación que D’Auro hizo por escrito se da en un momento en el que la relación con su ex atraviesa, otra vez, por uno de los peores momentos. Fue por esto que ella, a través de su abogado Eduardo Sande, decidió suspender la demanda de divorcio momentáneamente–para la ley esto se llama “desistimiento de la acción”– hasta tanto no se recomponga la relación familiar. Incluso pidió una “revinculación terapéutica”. De hecho, D’Auro hace alusión a esto: “Lamentablemente, en determinado momento se hizo patente no solo el desamor de mi cónyuge, sino la falta de respeto hacia mí, y actos de ultraje en la dignidad de mi persona (...). Entonces, resultaron frecuentes las situaciones de violencia en el ámbito familiar, propiciada exclusivamente por mi esposo; mientras nuestras hijas tuvieron que recurrir a la asistencia psicológica, que en varios informes alertó sobre la gravedad de los hechos desencadenados por él (...). En determinado momento empezó a trascender la existencia de un romance de mi esposo con una modelo y vedette cordobesa de 24 años de edad conocida como ‘Niña Loly’; y, no obstante las excusas de mi cónyuge de que se trataba de meros chismes propios del ambiente en el cuál él desarrolla su actividad profesional, debí rendirme ante la evidencia de la falsedad de sus dichos, al producirse el escandaloso blanqueo de su relación con la mentada Niña Loly, en todos los medios periodísticos. En efecto, ha sido amplia y públicamente documentado el viaje que mi esposo hiciera a Venecia y Roma con su joven novia, lo que provocó el comprensible estupor y dolor en quien expone, dado que en modo alguno preveía una conducta de semejante ultraje de parte de mi marido y la humillación pública que se derivó de dicha situación y de la posterior conducta de mi cónyuge hacia la suscripta y nuestras hijas. Como consecuencia de ello y de las actitudes adoptadas por mi esposo, las niñas se sublevaron en mi contra, me desautorizaron en cada situación en que pretendía que cumplieran con actividades mínimas de la vida familiar tales como bañarse, estudiar, levantarse para ir al Colegio, etc.; todo ello con la abierta complicidad y aquiescencia del padre que transformó a dos niñas en árbitros y jueces de la vida de pareja y familia. Para mis hijas pasé a ser una loca desquiciada y la Niña Loly una ‘grosssa’... en el lenguaje de las chicas; algo inmanejable por no contar con la menor colaboración o empatía de parte de mi cónyuge, quién propiciaba tales conductas de falta de respeto e intolerancia de parte de las niñas, mediante su propio discurso peyorativo a mi respecto.”

Adulterio. “Así fue como tomé conocimiento de la decisión del demandado de dar unilateralmente por concluido nuestro matrimonio de la manera más brutal, mediante las publicaciones de los medios, todas ellas ilustrativas del adulterio que mi esposo cometiera sin ningún tipo de pudor, respeto, o cuidado (...). De pronto, ese modo de actuar que caracteriza la actuación profesional de Rial –ámbito en el que denosta, denigra, ofende, insulta, amenaza físicamente a sus ocasionales adversarios, los desafía a pelear, los trata de “cagones”, manipula la información para dejar mal parados a sus enemigos; seduce al poder de turno y trata de caer siempre bien parado, aun con las mentiras más burdas; y si se equivoca, rápidamente muda de parecer, imputando su error a algún colaborador– pasó a ejercerlo a mi respecto, descalificándome como esposa y madre y exponiéndome públicamente como destinataria de ese tipo de actitudes”.

Por ahora, D’Auro espera lograr una primera victoria en la causa por extorsión que le inició Rial, veredicto que la Justicia dará dentro de los diez días hábiles posteriores al escrito presentado por ella y su abogado. Para más adelante quedarán las otras causas que se tramitan en los respectivos juzgados.

Fuera de esta presentación y por consejo de su abogado, desde la publicación del reportaje concedido en el verano a la revista Noticias D’Auro decidió no realizar entrevista alguna con ningún medio, incluido PERFIL, y hace tiempo ha desestimado el uso de su cuenta de Twitter para referirse al presente personal de su ex marido.

Por su parte el conductor tampoco se ha referido a ella en su programa a pesar de contar con la venia de los directivos de America para hacerlo. Pero el pasado martes , en Infama, uno de los ciclos de la emisora, le dedicaron más de dos bloques a la presencia de Silvia D’Auro en los tribunales e informaron que ella no había querido declarar oralmente sino a través de un escrito. La guerra continua.