Tuvo un debut soñado ayer en el Mundial de Rusia 2018. Sus tres goles contra España le dieron a Portugal un punto que puede ser decisivo para su clasificación. Sin embargo, para Cristiano Ronaldo no todo es alegría ya que precisamente España fue el país donde lo condenaron por fraude fiscal. El futbolista recibió una pena de dos años de prisión –no efectiva– y deberá pagarle al fisco casi 19 millones de euros.
Tras varios meses de negociación, las partes llegaron a un acuerdo que daría fin al caso. Por un lado, la oficina fiscal reclamaba que el deportista había evitado pagar impuestos por derecho de imagen entre 2011 y 2014 a través de un conjunto de empresas fantasma. La suma que habría desviado a paraísos fiscales alcanzaría los 150 millones de euros. Los abogados de Ronaldo decidieron que la mejor opción era pactar y obtener un arreglo donde la pena dada a su representado fuera excarcelable de prisión.
“Nunca quise ocultar nada ni tuve la intención de defraudar al Estado”, declaró el jugador del Real Madrid. De todas formas, no pudo esquivar a la Justicia y deberá hacerse cargo de sus acciones. Por el momento, falta la firma del director de la Agencia Tributaria para cerrar el pleito y se espera que en los próximos días el funcionario dé el visto bueno.
Ataque al mensajero. El hecho fue revelado por el medio español El Mundo hace varios meses y en aquella oportunidad se generó una polémica tras la noticia. “Ronaldo nos acusó de mentirosos; dijo que todo era un montaje y sus asesores me demandaron. Fui linchado en las redes. Hoy reconoció que cometió cuatro delitos fiscales, aceptó dos años de prisión y pagará una multa de 19 millones de euros. ¿Quién mentía?”, escribió Pedro García Cuartango, quien era el director del diario en ese momento.
La investigación fue similar a la que tuvo que someterse Lionel Messi hace unos años. Sin embargo, en aquella oportunidad el argentino no tuvo la posibilidad de negociar un acuerdo. El jugador y su padre decidieron pagar la plata adeudada –dos millones de euros– y aceptar 21 meses de prisión, los que también fueron excarcelables. “Un capo criminal”, dijo exaltado la Abogacía del Estado sobre el delantero del Barcelona. Por su parte, este último se exculpó diciendo que “no maneja la plata ya que de eso se encarga su papá”.
Una práctica repetida. Los dos futbolistas más poderosos del mundo –Messi y Ronaldo– tuvieron que enfrentarse ante el mismo problema con el fisco y la Justicia española. En ambas circunstancias fueron encontrados culpables por evasión y tuvieron que pagar grandes sumas de dinero aunque evitaron la cárcel.
Otros jugadores que también pasaron por lo mismo fueron Javier Mascherano y Angel Di María –ambos integrantes de la Selección que hoy debuta en Rusia–, en lo que parece una actividad común entre las estrellas de la la millonaria liga española.
