Vestido de estilo informal, con un suéter azul, una camisa blanca y blazer, acompañado de su abogado y con tres libros bajo el brazo por si quedaba detenido. Así llegó ayer Harvey Weinstein a la comisaría de Nueva York donde se presentó de forma voluntaria. Acusado bajo los cargos de violación y abuso sexual, fue esposado y trasladado a un juzgado de Manhattan. Una vez allí, entregó su pasaporte y se le colocó un dispositivo GPS para conocer su paradero en todo momento. Por último, realizó el pago de un millón de dólares –de los diez que se le habían impuesto como fianza– y se retiró a su domicilio, en lo que pareció más un trámite que una entrega.
Ben Brafman, abogado que lidera la defensa del otrora pope de las producciones de Hollywood, volvió a declarar ante los medios que su cliente “no inventó el casting sábana, y si bien sus acciones no fueron correctas, no obligó a ninguna mujer a tener sexo con él”. Luego informó que presentará una apelación para inhabilitar las demandas realizadas en su contra el pasado 5 de octubre. Estas últimas fueron las que generaron el despido de su compañía, el rechazo de toda la industria cinematográfica de su país y su expulsión de la Academia de Hollywood.
Ellas opinaron. Antes de saber que sería liberado, varias actrices víctimas de abuso por parte de Weinstein celebraron la noticia en las redes sociales. “Te tenemos, por fin te tenemos. Que esta detención dé esperanza a todas las víctimas y sobrevivientes que están contando su verdad”, escribió Rose McGowan, una de las primeras en revelar los ataques sexuales. “Hoy dará el primer paso para comenzar su descenso inevitable hacia el infierno. Nosotras, las mujeres, finalmente tenemos esperanza de justicia”, señaló Asia Argento por su parte.
Ellas no estuvieron solas, ya que recibieron el apoyo de sus colegas. “En el día de hoy, un hombre cuyas acciones generaron un repudio a nivel global será llevado a custodia. Ha destruido la vida de muchas mujeres y nosotras nos paramos junto a ellas, que han soportado ambientes de trabajo abusivos. Seguimos en la búsqueda de justicia”, expresó Anne Hathaway en un comunicado. Por último, Gwyneth Paltrow comentó que logró salvarse de un ataque sexual de Weinstein solo porque Brad Pitt, su novio en ese momento, amenazó con matarlo si volvía a hacerla sentir incómoda.
El acusado de violación solo cuenta con el apoyo de sus abogados, ya que hasta su mujer lo dejó: Georgina Chapman pidió el divorcio, y hace unos días habló por primera vez tras los hechos. “Una parte de mí fue extremadamente ingenua, claramente muy ingenua. Tengo momentos de ira, tengo momentos de confusión y tengo momentos en los que simplemente lloro por mis hijos”, dijo mientras explicaba que los niños aman a su papá y ella no puede soportar la situación.
Sus dichos desencadenaron las críticas de varias personas que no creen su versión de la historia. Anna Wintour, jefa de la edición estadounidense de Vogue, salió en su defensa: “Estoy firmemente convencida de que no tenía idea sobre el comportamiento de su esposo. Culparla de parte de eso, como muchos han hecho en nuestra era digital, está mal. Creo que uno no debe responsabilizar a una persona por las acciones de su pareja. Lo único que debería recibir es nuestra compasión y comprensión”.
Impulso. Tras la liberación bajo fianza de Weinstein, la investigación –que terminará en un juicio– sigue su curso. El ex magnate de la industria cinematográfica continúa sin realizar declaraciones públicas y deja que su abogado Ben Brafman oficie de vocero. Según dijo este último, no planean llegar a acuerdo alguno, ya que su cliente no admitirá ser culpable de los cargos de los que lo acusan. Su primera experiencia con la Justicia le resultó favorable, y espera el futuro lejos de prisión.
Advertencia a los cómplices
El domingo pasado, la actriz y directora italiana Asia Argento dio un discurso en el cierre de Cannes. “Fui violada aquí por Harvey Weinstein en 1997, cuando tenía apenas 21 años. Este festival era su terreno de caza”, comenzó ante la mirada de los presentes. Luego señaló que el productor ya no es recibido por la industria del cine, pero que al mismo tiempo fue esta última la que lo “abrazó y encubrió durante mucho tiempo”.
Antes de terminar su discurso, advirtió: “Incluso esta noche, sentados entre ustedes, hay quienes aún deben rendir cuentas por su conducta hacia las mujeres. Sabes quién eres. No perteneces a este sector. Sabemos quién eres, y no vamos a permitir que te salgas con la tuya”, dijo Argento ante un público que la aplaudió pero que también quedó sorprendido por sus palabras.
