Pasar algunos días de vacaciones en la Costa Atlántica no es lo más económico, dado que los hospedajes registran valores elevados. Pero veamos cuánto cuesta el día a día en la playa con cientos de vendedores que pasan por la playa ofreciendo churros, pareos y pulseras.
Un clásico del mediodía es el choclo y cada uno tiene un valor de $500. Otro infaltable es el pochoclo para los chicos y, por qué no, para los grandes también. Se venden en dos tamaños que cuestan 600 y 800 pesos respectivamente.
Los helados de agua se comercializan mucho después del almuerzo y los más baratos cuestan unos $400. Ahora sí, llegó la hora del mate y la docena de churros con dulce de leche cotiza a unos $1.000.
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Siendo una necesidad básica, una botella de medio litro de agua sale $600 pesos, pero te dan una promoción de 2 por $1.000. Por otro lado, tomar un licuado en un parador puede estar entre $900 y $1.000.
Ahora bien, darse un gustito en indumentaria es bastante accesible ya que una pulserita sale $500, las vinchas, en tanto, están $800 y hacerse una trenza va de $1.000 a $1.500 pesos.
Por otro lado, los shorts deportivos de mujer rondan los $3000 y las túnicas y pareos están en torno al mismo precio mientras que hay algunas de estas prendas con telas importadas que arrancan a partir de los $4.000. Más allá de que elijamos, lo importante es que hay muchas opciones.
