El chofer del colectivo de la empresa Vía Bariloche que volcó este martes cuando iba de Miramar hasta General Pacheco quedó imputado por homicidio agravado por conducción negligente y quedó a disposición de la justicia. Tiene 24 años y como resultado del accidente está en grave estado bajo custodia policial. Pero cuando se recupere quedará detenido.
El vuelco, que al parecer se produjo porque el chofer se quedó dormido, provocó la muerte de dos pasajeros de los 38 que viajaban y otros 14 quedaron heridos.
Al chofer -del que no se difundió el nombre- lo acompañaba uno de reemplazo, de 35 años. Le hicieron el test de alcoholemia en el momento y dio negativo.
Contra el acompañante no se tomó ninguna medida, pero declarará como testigo.
El chofer del colectivo fue imputado por doble homicidio agravado por conducción negligente
El conductor será trasladado en las próximas horas a un centro de mayor complejidad. Todavía no se le pudo notificar de la aprehensión por su estado. Fuentes de la causa afirmaron que el delito que se le imputa es el de homicidio culposo agravado por conducción negligente o imprudente de un vehículo motorizado, una calificación más grave que la que enfrentó Alberto Gustavo Maldonado, el chofer que en noviembre del año pasado protagonizó el vuelco que le costó la vida a 2 menores en el kilómetro 141 de la misma ruta.
Todo indicaría que quedaría el chofer quedaría privado de su libertad. Será decisión de la fiscal en las próximas 24 horas que estipula la ley.
Luego de realizar un peritaje en el lugar, la hipótesis de la justicia es que el chofer se quedó dormido, ya que no hay marcas que indiquen una mala maniobra o un volantazo como la causa del vuelco. El que lo acompañaba dijo que efectivamente fue eso lo que pasó.
David, uno de los testigos del accidente, contó que al comienzo del viaje, el micro se llevó puesto un cordón, y que además no frenaba en las lomas de burro: “hubo muchas irregularidades desde el comienzo, pero nadie comentó nada”, confirmó a la prensa.
"Hubo muchas irregularidades desde el comienzo del viaje", afirmó David, un testigo del accidente
Por su parte, se difundió un audio del otro chofer en el que afirma que el colectivero de 24 años “se durmió y se despistó”. Estas declaraciones se suman a otras como la de Daniela, amiga de dos de los pasajeros, que escuchó hablar al chofer con unas empleadas de limpieza de la terminal, antes de salir: “me tienen de acá para allá” y que lo tenían “sin descansar”.
Una de las pruebas más importantes es el tacómetro del micro, que servirá para determinar a qué velocidad iba el colectivo de Vía Bariloche. También se realizará un análisis en los teléfonos de los choferes para ver si intercambiaron mensajes antes de salir de viaje.
Por último, empleados del Ministerio de Transporte en conjunto con la fiscalía analizan la documentación de la empresa y la que se encontró en el vehículo. También corroborarán si los choferes cumplieron con las horas de sueño necesarias.
AC/MC