Aceptó ser extraditado al país el ex piloto de la Armada acusado de participar en los "vuelos de la muerte"
Julio Alberto Poch
aguardaba en España la decisión. Dijo que aceptó ser entregado a la Justicia
argentina “
para poder defenderse”.
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EFE
El ex piloto militar Julio Alberto Poch, detenido en España, aceptó hoy ser extraditado para ser juzgado en la Argentina debido a su presunta participación en los denominados "vuelos de la muerte", informaron fuentes judiciales en Madrid.
Poch aceptó ser entregado a la justicia argentina " para poder defenderse", al comprecer ante tres magistrados de la Audiencia Nacional, principal instancia penal española. El piloto, que anteriormente había rechazado ser extraditado, también solicitó "un juicio justo" en Argentina, donde está reclamado por el juez Sergio Torres.
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La justicia argentina lo acusa de supuesta participación en los denominados "vuelos de la muerte" llevados a cabo durante la dictadura, en los que opositores al régimen eran arrojados al mar desde aviones militares. Estos hechos se cometieron cuando Poch era piloto de la base de la ESMA (Escuela de Mecánica de la Armada), según la justicia argentina.
La caída de un militar. En septiembre del año pasado, un diario español reveló que el ex ex teniente y aviador de la Armada estaba a punto de jubilarse como piloto de la línea aérea holandesa "Transavia" y planeaba dejar su chalé en Zuidscherme, un pueblo a 25 kilómetros de Amsterdam, para irse a vivir a la playa de Xeraco, en Valencia.
Como Poch era miembro del selecto grupo de comandantes "senior" de "Transavia", el número 23 de los 512 pilotos, la compañía le dio a elegir un destino para su último vuelo antes del retiro y él escogió ir a Valencia, sin saber que allí se montaba un operativo para capturarlo.
Sin embargo, y antes de que pudiera concretarse el retiro, Poch fue detenido en un avión donde también viajaba su esposa argentina, el primogénito de ambos -de 33 años, también piloto de "Transavia"- y su mujer, todos los cuales habían querido acompañarlo en su viaje de final de carrera antes de la jubilación, que terminó frustrado por la Justicia.
El pedido de extradición de Poch fue realizado por el juez federal Sergio Torres, a cargo de la llamada " megacausa ESMA". Torres le imputa al argentino su presunta actuación como piloto de los "vuelos de la muerte" con que la Armada arrojó al mar a unos 4.500 personas que estuvieron secuestradas en la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA).
Según sus compañeros de tripulación en "Transavia", que le delataron a la policía holandesa y dieron origen a la investigación judicial, Poch presumía en conversaciones con ellos de haber actuado en los "vuelos de la muerte" arrojando con vida al mar a quienes él consideraba como "terroristas de izquierda". Pero trataba de aliviar el asunto diciendo que las víctimas "eran previamente drogadas" con Penthotal.
Poch tiene 57 años, estudió en el Colegio Nacional Buenos Aires de donde egresó como bachiller en 1968, entre 1969 y 1972 cursó la Escuela Naval Militar, en Río Santiago, y luego se especializó en el arma de la aviación naval, adonde llegó al grado de teniente de fragata.
Se retiró el 1 de febrero de 1981 y luego se fue a vivir a Holanda con su esposa y tres hijos, donde obtuvo la doble nacionalidad argentina-holandesa, y vivió en un suntuoso chalet.
