La casa de Ricardo Righi, padre de una de las victimas de Cromañón, fue allanada esta mañana por orden de la jueza María Servini de Cubría, en una causa por presuntas amenazas contra el ministro del Interior, Aníbal Fernández.
Así lo confirmaron a fuentes judiciales, que precisaron que durante el allanamiento fue secuestrada una computadora desde la que habría sido enviado un e-mail supuestamente amenazante.
En conversación con Canal 26, Righi se mostró indignado con la jueza. “Están haciendo lo que quieren. Que nos peguen un tiro si quieren y no arrojen al río”, dijo.
“No estoy loco ni enfermo”, señaló el hombre respecto a las pericias psiquiátricas que pidió el abogado defensor de la banda de rock Callejeros. Sobre esos estudios, explicó que “los mismos que deberían hacer los estudios están querellados, son el cuerpo médico forense”
“Nos empujan a un abismo institucional”, indicó. “La justicia no actúa como debe, yo me manejo institucionalmente, jamás de los jamases lastime a una personas”, detalló sobre sus airadas protestas.
Para explicar algunas expresiones que fueron consideradas amenazantes, Righi lo adjudicó a “todo lo que hemos sufrido”.
“ A mi hijo lo dejaron morir, eso está explicado en un informe de 100 hojas donde están todas las cuestiones científicas”, señaló.
Hace dos semanas Ricardo Righi fue obligado a salir de Córdoba por la Justicia. Ante la noticia de que el conjunto Callejeros brindaría un concierto, amenazó con “prender fuego toda la provincia”.
En la tragedia del boliche de Cromagnon murieron 194 jóvenes. Ricardo Righi es considerado como el sector duro de los familiares de la víctimas.