El linyera "Siete Sacos" apareció ayer sano y salvo en la estación de trenes de San Francisco Solano, partido de Quilmes. Había desaparecido el viernes 10 de julio y todo Berisso se preguntaba por su paradero. Aunque nadie lo conocía en la intimidad, había encantado a la ciudad y muchos se movieron para tratar de encontrarlo, incluso con una campaña en la red social Facebook.
Un llamado telefónico advirtió de la presencia en la terminal ferroviaria de un hombre de similares características al vagabundo más conocido de la zona. Personal de Gabinete de Búsqueda de Personas de la DDI La Plata respondió al aviso, fue al lugar y confirmó las sospechas.
"Siete sacos", "Carlitos" o "Toto", estaba deambulando a un costado de las vías y sin noción alguna de cómo había llegado hasta esa localidad. El portal Berisso Ciudad indicó que el linyera tenía un pequeño golpe en la cabeza que no sería preocupante.
Según informó el diario El Día, anoche lo trasladaban hacia el hospital Mario Larrain, previo paso por la dependencia policial, para una evaluación sobre su estado de salud.