Pese a la oposición de los vecinos de la zona de Catalinas Sur, en el barrio de La Boca, los legisladores porteños sancionaron una la ley que promueve el cambio de zonificación urbana sobre un predio delimitado por las calles Azopardo, Brasil, la autopista La Plata-Buenos Aires, Pedro de Mendoza, Gualeguay, Caboto, Arnaldo D'Espósito y Necochea. Se trata de un predio que, además, toma parte de las tierras en las que se encuentra el Darling Tennis Club, una institución de casi 100 de antigüedad en el barrio. El área afectada del club corresponde a tres canchas de tenis, una de fútbol y el estacionamiento.
Socios de esa institución y vecinos del barrio Catalinas Sur siguieron con atención la sesión en la que se votó la nueva ley, y mostraron su disconformidad portando carteles y banderas con la leyenda “No a las Torres”.
Las autoridades del centenario club, en tanto, aseguraron a Perfil que “agotadas las instancias administrativas los próximos pasos se encaminan hacia la presentación de un amparo ante la Justicia con el objetivo de frenar la aplicación de la normativa. Lo haremos invocando el artículo 18 de la Ley de Clubes vigente en la Ciudad”.
De esta manera, se permitirá un área de construcción de edificios de hasta 75 metros de altura, según el plano límite fijado, destinada a la localización de equipamiento administrativo, financiero e institucional y que también admite usos compatibles con la vivienda. Una especie de prolongación de Puerto Madero en pleno barrio de la Boca. La ley, que ya contaba con media sanción, recibió aprobación definitiva con 33 votos positivos y 26 en contra, en el marco de la sesión ordinaria de la Legislatura.
La propuesta convierte en urbanización parque (UP) una franja de terrenos que en la actualidad pertenece a la asociación civil Catalinas Sur, dedicada a tareas sociales en el barrio, a través de un permiso de uso otorgado por el Gobierno local. Por otra parte, la nueva normativa plantea desprenderse de una parte del polígono que pertenece al Estado nacional, por lo que ambos distritos rubricaron un convenio para habilitar la venta de la fracción.
Desde la oposición en tanto, el legislador del socialismo Roy Cortina consideró que “este proyecto que autoriza la construcción de torres con viviendas VIP en el extremo de La Boca va a contramano de las necesidades de un barrio atravesado por profundas necesidades”, mientras que Carlos Tomada, del Frente para la Victoria, aseguró que “es un mal proyecto para la Ciudad y para La Boca porque va a alterar la vida comunitaria”.
