Los restos del barra argentino muerto en Sudáfrica, Luis Forlenza, están más cerca de ser repatriados. Después de permanecer 88 días en una morgue de Ciudad del Cabo, los reclamos de su único familiar, su hija Vanesa, agilizaron las gestiones.
La mujer logró que se considerara su situación económica y los costos del traslado bajaran de 5340 dólares a 1900. Los aportantes fueron dos barras de Boca Juniors, compañeros de su padre en el periplo, llamados "Chueco" y "Piturro" y los vecinos del barrio, en José León Suárez, publicó el diario Clarín.
Ahora, Vanesa Forlenza enviará ese lunes el dinero y quedará a la espera de los restos. Su padre había muerto el 6 de julio pasado, tras la derrota de Argentina y Alemania, después de ser atacado por barras de Independiente en las inmediaciones de la terminal de ómnibus de Ciudad del Cabo.