La aprobación en el Senado de la ley que regula las prepagas fue saludada por las organizaciones de defensa al consumidor que venían bregando por su control. Si bien el proyecto, aprobado en general, volverá a la cámara de Diputados con modificaciones, la expectativa ahora está puesta en su tratamiento: "Yo reclamo una sesión especial el 30 de noviembre para que aprueben la ley", pidió Héctor Polino, de Consumidores Libres a Perfil.com para no estirar la aprobación hasta marzo.
"Y si no, que la presidenta convoque a sesiones extraordinarias e introduzca este tema porque lo más probable es que el año que viene, al ser electoral, se diluyan las posibilidades de sanción de la ley con lo cual perdería estado parlamentario", agregó el ex diputado del Partido Socialista.
Entre las claves para entender la norma, Polino destaca: "Se van a terminar los abusos y arbitrariedades de todo tipo que cometen las empresas de medicina prepaga. Las más comunes están referidas a los períodos de carencia o espera que arbitrariamente establecen las empresas", indicó. "Ese es el período que va desde el momento en que uno se asocia hasta el momento en que comienza a hacer las prestaciones".
Con la nueva ley se elimina el período de espera y cuando los afiliados se inscriben las empresas quedan obligadas a prestar los servicios establecidos en el programa médico obligatorio.
Polino aseguró que "la edad no puede ser tomada como criterio de rechazo de admisión. Hoy las empresas si uno tiene más de 65 años, arbitrariamente pueden rechazarlo".
El dirigente socialista aclaró, además, que de aprobarse la medida se "tiene que tomar a todo el mundo y en los casos de personas mayores de 65 años la Autoridad de Aplicación que es el Ministerio de Salud debe definir los porcentajes de aumentos de costos según el riesgo para los distintos rangos etarios. Y si un asociado, tiene diez años de antiguedad en la prepaga y cumple 65 le tienen que mantener el valor de la cuota".
La realidad es que desde el retorno de la democracia las prepagas nunca fueron reguladas y aunque desde estos sectores se batalló por llevar la discusión al Parlamento "nunca se pudo lograr por las presiones, los lobbys, los grandes intereses creados", precisó Polino. En rigor, la ley se aprobó en Diputados el 27 de agosto de 2008 y al día siguiente, una vez en el Senado, se cajoneó hasta este miércoles.
Sandra González, de la Asociación de Defensa de los Consumidores y Usuarios de la Argentina (ADECUA) le dijo a este portal: "Estamos de acuerdo más allá de que vuelve a Diputados pero si no se votaba ayer perdía estado parlamentario. Hace dos años que está parado, me parece que es un avance tener una ley. Va a ser un sector que, sin tener tener ningún tipo de regulación, la va a tener".
La voz de las prepagas. El último domingo, el dueño de Swiss Medical, Claudio Belocoppit, se quejó ante el diario La Nación que "la garantía constitucional del servicio de salud la debe dar el Estado, mientras que la prepaga debería ser una alternativa. Esta ley está hecha como si la responsabilidad de la salud fuera primariamente de las prepagas y no del Estado".
"Si se aplica esto, en 60 o 90 días el sistema privado no existe más", señaló contundente el empresario. Desde Osde, por su lado, anticiparon a Perfil.com que no "habrá un cambio sustancial" con la nueva norma ya que "históricamente estamos regulados como obra social como lo establece la Superintendencia de Servicios de Salud” y anticiparon que esperan el "texto definitivo" de la ley.
