La relación médico-paciente se ha ido deteriorando en los últimos años. Hemos pasado del erróneo autoritarismo donde la palabra del profesional era indiscutible a una relación distorsionada, marcada por la falta de códigos y de respeto. Las situaciones extremas que se viven hoy en clínicas y hospitales son abundantes y están directamente vinculadas con el alto grado de deterioro y falta de contención social, propias de la Argentina de la exclusión. Sin embargo, este tipo de hechos también se da entre los sectores medios.
Los médicos que tienen que trabajar para diferentes prepagas, en varios consultorios, presionados por la falta de tiempo, pierden el vínculo afectivo que altera la relación con sus pacientes. Hay un marco de violencia generalizada que se extiende a todos los sectores. Así como ocurre con los maestros, también los médicos están cada vez más expuestos a las agresiones.
Yo mismo he sufrido situaciones de violencia ejerciendo la profesión. En una ocasión un paciente me amenazó diciéndome: “Atiéndame bien porque si no, le hago un juicio”. Las amenazas por mala praxis generan una violencia moral que han hecho que muchos médicos decidieran abandonar la profesión. Son momentos muy difíciles, shockeantes, y de lo que el paciente no puede darse cuenta es de que en esos casos él es quien resultará más perjudicado. ¿Cómo puede atender un médico que ha sido agredido o amenazado, que se encuentra nervioso, estresado?
Las consecuencias que la violencia genera en la buena práctica de la medicina son terribles. El paciente se convierte en un potencial enemigo para el médico y viceversa. Además, la calidad de prestación empeora muchísimo, porque es casi imposible seguir atendiendo en esas circunstancias.
Considero que será muy difícil reconstruir la relación médico-paciente. Esto exigiría grandes cambios en la forma de practicar hoy la profesión. Si bien ésta es una situación dramática y muy preocupante, sólo se discute entre colegas, en algunos congresos. Creo que la sociedad debe enterarse de esto y generar un debate público en busca de soluciones.
* Médico y periodista.