SOCIEDAD
clara estrategia

Desde la clandestinidad y por medio de un video, un barrabrava se hizo cargo del crimen de Acro

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“Yo le disparé a Gonzalo Acro”. Así, sin vueltas, Ariel “el colo” Luna, el mismo hombre que la investigación del crimen señala como el autor material, se hizo cargo de la muerte del hincha de River por medio de un video casero que lo sacó por un rato de la oscuridad de la clandestinidad. En la cinta, en donde se lo ve con unos anteojos de gruesos vidrios y el pelo teñido de negro, Luna además despega del asesinato a Alan Schlenker y su facción, al tiempo que acusa a Aguilar y a Rousseau de armar la causa.

El video, que fue entregado al diario deportivo Olé, muestra la imagen de un hombre demacrado al que la policía busca, infructuosamente, hace mucho tiempo. Acro, de 29 años, fue atacado por Luna cuando caminaba junto a Osvaldo Matera el 7 de agosto de 2007 en Cullen y Bauness, en barrio porteño de Villa Urquiza. Acro, lugarteniente de Adrián Rousseau en una de las facciones de la barra brava riverplatense, antagónica a la que encabezaba Alan Schlenker, recibió tres disparos.

La “confesión”. "Soy Ariel Luna y decidí hacer esto porque estoy podrido de que hagan una historia de lo que pasó. Yo toda la vida fui y seré de la calle y tengo códigos. En esta causa que armaron Adrián y Aguilar, y compró todo el mundo, se ensució a gente que nada tenía que ver y se dijeron muchas cosas y por eso decido hablar”, comienza su declaración Luna.

“Nadie armó nada, nadie mandó a matar a nadie, nadie organizó nada. Empezaba el campeonato y tanto ellos como nosotros estábamos viendo qué hacía el otro grupo (...) Nosotros nos enteramos de que se juntaban cerca de la casa de Adrián y que algunos entrenaban en un gimnasio de villa Urquiza. Esa noche fuimos a lo de Rousseau y después al gimnasio. Yo me quedé en la esquina y vi venir a dos. Uno era Gonzalo Acro. Discutimos y él se me vino encima, me tiró una trompada, forcejeamos. Ahí yo saqué el arma y traté de defenderme. La tenía apuntando hacia abajo, cuando forcejeamos la levanto y cuando la otra persona (por Matera) me la quiere sacar, pasó lo que pasó”, recordó Luna.

“Nadie me mandó ni me pagó para matar a nadie, ni sabían que yo andaba armado. Pero cuando ellos fueron a lastimarnos a la cancha de River (se refiere a la batalla del playón del 6/5/07) estaba mi hijo en el medio de todo ese problema. Desde ese día yo decidí andar armado, también por problemas que traía de la cárcel y otras cosas. Y bueno, pasó lo que pasó, pero Alan, William y Pluto, que están detenidos, no tienen nada que ver, ni sabían que estábamos ahí. Y el oveja, Cuca y Kevin (acusados de estar en el lugar del crimen junto a Luna) son personas que no están acostumbradas a estas cosas y no estaban de acuerdo con que yo llevara armas ni nada. Por eso pasó lo que pasó y no lo pudieron impedir. Fue un accidente y nada más".

Todo parece indicar que, estrategicamente, la declaración de Luna favorecería la situación del resto de los integrantes del grupo de Schlenker, y la causa podría terminar con un solo culpable, por màs de que esté comprobado que muchos de los detalles que Luna arroja son inexactos.