Cuatro de cada diez hogares padecen "déficit grave" en sus condiciones de vida material, pese al crecimiento económico y la estabilidad política en el período 2004-2007, según los resultados del Barómetro de la Deuda Social que presentó ayer la Universidad Católica Argentina.
"La reducción del desempleo, el aumento de la capacidad de consumo y las expectativas futuras, beneficiaron principalmente a los estratos social más bajos, pero esa recuperación no alcanzó para reducir de manera significativa la brecha con los estratos altos", reveló el informe.
En tanto, otro relevamiento sobre la Deuda Social de la Infancia -en colaboración con la Fundación Arcor- reflejó que el 60 por ciento de los niños y adolescentes de los principales centros urbanos vive en hogares con "grave déficit de habitabilidad" y "bajo clima educativo".
El 14 por ciento de los menores de 0 a 17 años comparte cama o colchón para dormir,mientras el 32 por ciento vive en casas precarias y dos de cada diez viven hacinados. Según las mediciones del Barómetro de la Deuda Social Infantil, el 44 por ciento de las casas donde viven esos niños y adolescentes debió restringir el consumo de alimentos en el último año, y un 9 por ciento padeció la experiencia de tener hambre. En tanto, 33 por ciento dejó de atender su salud por problemas económicos.
Agustín Salvia, coordinador del Observatorio de la Deuda Social Argentina, destacó en la presentación que de la cuarta edición del Barómetro que éste tiene "un creciente reconocimiento público frente a otras estadísticas" y reclamó hacer "una lectura política" de estos resultados, sobre todo al gobierno que "tiene la responsabilidad política y moral" de revertirlos.
Tras recordar que "deuda social denota la privación injusta de recursos y capacidades de desarrollo", el sociólogo advirtió que si "el conjunto o uno" de los índices de pobreza, desempleo o desigualdad no alcanzan los niveles mínimos para una vida digna "no puede llamarse desarrollo a ese crecimiento" económico.
El informe sobre la Deuda Social Argentina determinó que pese a que se registró un reducción del número de personas que no cuentan con seguro de salud, en el estrato socioeconómico más bajo el déficit involucra al 58 por ciento de la población.
Asimismo, reveló que una cuarta parte de la población potencialmente activa evidencia actualmente problemas de empleabilidad manifiesta y que la mitad no logró ocuparse en un empleo de calidad, a pesar de que en el período 2004-2007 se registró "una importante reducción" de los problemas de acceso a oportunidades laborales.
También destacó que "la recuperación del índice de confianza política fue impulsada principalmente por el mayor avance de la confianza en el Gobierno nacional", con el consiguiente paso a "un segundo plano" de otras instituciones como el Congreso, la Justicia o los partidos políticos, que no sufrieron cambios significativos en su imagen el período.
"Esto da cuenta de la tendencia extrema que presenta la sociedad argentina a depositar sus expectativas económicas y sociales en el Poder Ejecutivo, más precisamente en el presidente, en desmedro de otras instituciones democráticas, incluso del propio acto de votar", se evaluó en el informe de la UCA.
Los datos surgieron de encuestas realizadas en conglomerados con más de 200 mil habitantes del área metropolitana, el Gran Buenos Aires, Córdoba, Salta, Mendoza, Rosario, Resistencia, Paraná, Neuquén-Plottier y Bahía Blanca, sobre una muestra de 2.520 encuestados, de los cuales 1.740 casos fueron comparables en el período 2004-2007.
Fuente: DYN