El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, informó hoy que fueron confirmados en el país dos casos de fiebre chikungunya, un virus que transmite cierto tipo de mosquitos, pero que raramente es mortal, en tanto que otros dos pacientes estaban siendo analizados.
Se trata de un virus que transmiten los mosquitos aedes aegypti y aedes albopictus, los mismos vectores del dengue, que produjo brotes en África y Asia, pero que recién el año pasado se presentó en América.
Capitanich aseguró que "el virus no circula en la República Argentina" y que, de los cuatro casos, dos están confirmados y dos son "sospechosos", pero la totalidad "son importados", insistió.
En ese sentido, en su habitual ronda de prensa, el jefe de ministros puntualizó que el Ministerio de Salud "ha detectado e informado" que "en la última semana" se presentaron en el país "dos casos" de chikungunya que poseen "una primera confirmación laboratorial".
En tanto, otras dos personas están consideradas hasta hoy como "sospechosos" de padecerla y "aún no tienen laboratorio", precisó en referencia a que resta esperar los resultados de los análisis.
"Todos son casos importados y coinciden en que los cuatro son personas que viajaron a la República Dominicana", manifestó.
Asimismo, aseguró que "los cuatro pacientes se encuentran en buen estado de salud, recuperándose en sus respectivos domicilios". La cartera sanitaria, agregó, ya realizó "los bloqueos de foco en las zonas de residencia" de los enfermos y dispuso el "aislamiento de los pacientes en sus hogares".
La fiebre chikungunya es una infección que dura entre cinco y siete días y produce alta temperatura y fuertes dolores articulares, en algunos casos incapacitantes, pero rara vez causa la muerte a quien lo padece.