Una joven embarazada de nueve meses murió electrocutada cuando intentó abrir la heladera de su casa en Florencio Varela descalza y con las manos mojadas pero los médicos lograron salvar la vida de su hijo al forzar un parto por cesárea, informaron hoy fuentes policiales.
El bebé, que también había sufrido la descarga eléctrica, se encuentra en buena evolución, asistido con oxígeno.
El caso, que se conoció hoy, ocurrió días atrás cuando Débora Alarcón, de 21 años, lavaba ropa en su casa de la calle La Rastra y Cala, jurisdicción de la comisaría quinta de Florencio Varela.
La joven, que se encontraba descalza, intentó abrir la heladera con sus manos mojadas por lo cual recibió una fuerte descarga que le provocó la muerte.
La víctima, quien tenía otro hijo, fue llevada por sus familiares al hospital subzonal Materno Infantil de San Francisco Solano, donde le practicaron sin éxito maniobras de resucitación.
Los médicos del centro asistencial la sometieron entonces a una operación cesárea y pudieron salvar la vida del bebé que pesó 3 kilos con 400 gramos.
Fuente: DyN